El vicepresidente y consejero de Economía y Hacienda autonómico, José Manuel Soria, avanzó ayer, en la reunión de la mesa de seguimiento del Pacto por la Economía y el Empleo, que su departamento ya ha ultimado la redacción del proyecto de ley que diseña un impuesto especial sobre el tabaco en las Islas y que éste será aprobado, con toda probabilidad, en la próxima reunión del Consejo de Gobierno de Canarias para su remisión inmediata al Parlamento regional. Precisó que los primeros cálculos apuntan a que con esta nueva figura tributaria el Ejecutivo recaudará 55 millones extras sobre la cifra que obtiene en la actualidad por este concepto vía AIEM e IGIC.

Así lo señaló ayer, a preguntas de este periódico, el secretario general de la CEOE-Tenerife, Pedro Alfonso, que informó de que la patronal tinerfeña solicitó a José Manuel Soria tener acceso cuanto antes al documento para determinar el impacto que tendrá sobre una actividad productiva que, según recordó, atraviesa por horas bajas en el Archipiélago.

Actuar con cautela

Hay que recordar que hace pocas fechas, el gerente de Agrupatabaco, Andrés Arnaldos Martínez, señaló que "por las graves consecuencias de orden económico y social que trae aparejado el cambio de modelo de la fiscalidad aplicada a los cigarrillos rubios, confiamos en que éste se lleve a cabo tras un debate sosegado en que se oiga a los agentes económicos y sociales".

A principios de este mes, en un desayuno con periodistas en Las Palmas, Soria se mostró partidario de demorar la entrada en vigor del impuesto especial sobre el tabaco en las Islas, dado que "no es el momento económico más oportuno", pero también dejó claro que la decisión final correspondía al Gobierno autónomo. En aquella ocasión detalló que el proyecto de ley elaborado por la Consejería de Economía y Hacienda establece como hipótesis unos importes medios de venta y tres tipos de precios: el caro (un euro), el medio (0,50 euros) y el bajo (0,25). Si estos fueran los precios definitivos, siempre según Soria, la tributación adicional por cada cajetilla de 20 cigarrillos implicaría que para el tabaco más económico habría un aumento que supondría el 15% de la carga fiscal adicional total. La cajetilla del precio medio soportaría un 27,5% de la misma y la del caro, un 40,7%.

Soria recordó que Canarias dispondrá en sus presupuestos para el próximo año de 950 millones de euros menos como ingresos y, por tanto, deberá disminuir el gasto público en la misma cuantía para presentar unos presupuestos equilibrados.

Patronal y sindicatos mostraron su predisposición al diálogo, pero reclamaron que no se autoricen recortes en capítulos que puedan restar efectividad a los planes en marcha para generar empleo. Eso sí, CCOO y UGT mostraron al Gobierno su malestar con el desarrollo del pacto social por la economía y el empleo, que de momento, en su opinión, no está dando los frutos esperados.