Los bancos y las cajas de ahorros siguen mostrándose reticentes a abrir el grifo de la financiación a las empresas. El panorama apenas ha cambiado en los últimos dos años, tal y como pone de relieve la "Encuesta sobre el Acceso de las Pymes a la financiación ajena", elaborada por las Cámaras de Comercio españolas para el segundo trimestre de 2010.

Los créditos se siguen dando a cuentagotas, mientras continúa la escalada de avales y garantías que se solicitan a las empresas para la concesión de un préstamo. Canarias no es una excepción en este terreno, según informó la Cámara de Comercio tinerfeña.

De hecho, la falta de financiación se coloca, por detrás de la caída del consumo, como el factor que más está ahogando la capacidad de inversión y de liquidez de las pymes del Archipiélago.

Así que, aunque los empresarios canarios vayan recuperando muy tímidamente su confianza sobre la evolución económica, la política crediticia de las entidades financieras de las Islas sigue sin cambiar el rumbo e, incluso, se ha ido recrudeciendo en los últimos tres años, según revela el Indicador de Confianza Empresarial, elaborado por la Cámara de Santa Cruz de Tenerife y Las Palmas.

Una realidad que es el espejo de la coyuntura nacional que refleja también la última encuesta realizada por las Cámaras de Comercio sobre una muestra de 400 pymes de entre 1 y 249 trabajadores. Para el 82 por ciento de éstas han aumentado las exigencias de garantías y avales y para el 45,7 por ciento de las empresas que accedieron a financiación durante el segundo trimestre del año fue incluso necesario presentar garantías de carácter personal para poder optar al crédito.

Asimismo, atendiendo a los costes, el 62 por ciento de las empresas consultadas afirma que los tipos de interés se han encarecido y un 66,8 por ciento declara haber pagado más en gastos y comisiones.

DE PRIMERA MAGNITUD

Para el presidente de la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife, Ignacio González Martín, "la escasez de recursos financieros constituye un problema de primera magnitud, que hace peligrar no sólo los puestos de trabajo que genera la iniciativa privada, sino la propia supervivencia del negocio".

En este sentido, pide a las entidades bancarias y cajas de ahorro una mayor fluidez en su política de concesión de préstamos, sobre todo, tras los importantes resultados que las entidades españolas han tenido en la pruebas de solvencia, a las que se ha sometido a la banca europea. Apunta, además, que "sin el restablecimiento del crédito es imposible pensar en la recuperación económica de Canarias".

El incremento del paro, el descenso de las ventas y la incertidumbre económica se suman así al hostigamiento que sufren las empresas que en más de un 90 por ciento se ven obligadas a recurrir al crédito para financiar el circulante, es decir, para hacer frente a las necesidades de liquidez inmediata, ya que el 91,3 por ciento manifiesta que ha experimentado un retraso en los pagos de sus clientes, que se sitúa en torno a los 4 meses y medio.

La encuesta de las Cámaras revela que el más del 76 por ciento de las pymes españolas ha intentado acceder a financiación externa en el segundo trimestre de 2010. De ellas, el 85,5 por ciento asegura haber tenido problemas para acceder a la financiación, una cifra sin cambios respecto al primer trimestre de este ejercicio y del pasado año.

SIGUEN SIN PARAR

Además de estas dificultades otro de los problemas con el que se están encontrando las empresas es la demora de los pagos de sus clientes. El 90,8 por ciento de las pequeñas empresas consultadas han sufrido retrasos en los pagos de sus clientes y casi la mitad (49,4 por ciento) de las que son proveedoras de las Administraciones públicas tampoco cobran de acuerdo a lo estipulado en los contratos. El retraso medio en el pago se situó en torno a los 4,4 meses.

Los problemas principales para materializar el cobro se han presentado con la Administración Local, (27,8 por ciento), en segundo término con la Autonómica (22,8 por ciento) y, por último, con la Administración Central (10,1 por ciento).

REGLAS DEL JUEGO

A juicio del presidente de la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife, "es lógico que las entidades financieras tomen sus precauciones, pero lo que no puede hacerse es pasar es de un extremo a otro". Añade, además, que "sin crédito no funcionan las empresas y se profundiza aún más en el deterioro de la economía". Por lo tanto, la Cámara vuelve a insistir en la necesidad de que se articulen políticas eficaces que impriman una mayor fluidez en la concesión de préstamos, que eviten el estrangulamiento de la actividad empresarial de Canarias.