La bolsa española ignoraba los buenos resultados de la subasta de deuda y cedía el 0,45% a mediodía, en línea con la tendencia bajista que imperaba en la mayoría de los mercados europeos, que estaban a la espera de conocer resultados empresariales como los del banco estadounidense JP Morgan.

A las 12.00 horas, el principal selectivo del mercado español, el Ibex-35, se colocaba en 10.232,20 puntos, con una bajada de 46,30 puntos o el 0,45%.

Los mercados amanecieron hoy con sesgo negativo, después de que la Reserva Federal estadounidense anunciara ayer que el ritmo de crecimiento económico de Estados Unidos aminoró durante el segundo trimestre, según explicó en declaraciones el analista de CM Capital Markets Julián Benavente.

El Íbex-35 ignoraba por completo la buena acogida que tuvo la subasta de obligaciones a 15 años que celebró hoy el Tesoro Público y que se saldó de forma "muy positiva", según los analistas consultados, debido a la fuerte demanda de los inversores y a que se cumplieron los objetivos de colocación.

Los grandes valores del mercado español se mantenían en negativo a mediodía, entre ellos, los grandes bancos (BBVA bajaba el 1,44% y el Santander, el 0,99), que seguían afectados por las noticias sobre su dependencia de la financiación del Banco Central Europeo.

Otros pesos pesados como Telefónica también registraban números rojos, ya que la operadora de telefonía caía el 0,64%, seguida de cerca por Iberdrola, con el 0,59%, mientras que Repsol esquivaba las pérdidas al subir el 0,95%.

No obstante, la mayor subida del Íbex-35 era Ferrovial, que se disparaba el 8,35 a mediodía, aunque llegó a subir el 10,55% en las primeras horas de la sesión.

La constructora presidida por Rafael del Pino se vio beneficiada por el anuncio de una oferta sobre su socio en la autopista canadiense 407-ETR, una de las joyas de la corona de la compañía española.

La oferta por el grupo australiano Intoll, conocido anteriormente como Macquarie Infrastructure Group, supone valorar la autopista en más de 7.200 millones de euros, lo que dispara la cuantía que puede cobrar la constructora por el 10% que ha puesto a la venta del capital de la 407-ETR.