El presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, dijo hoy que "la sangría" de trabajadores autónomos afectados por la crisis económica no ha parado en Canarias y precisó que desde mayo de 2008 se han producido en las islas más de 10.000 bajas.

Amor, que asistió en Tenerife a la integración de 10 asociaciones de distintos sectores en ATA, afirmó que Canarias es una de las comunidades autónomas más golpeadas por la crisis y señaló que mientras en otras regiones, en sectores como el comercio o la hostelería, se está comenzado a crecer, esta tendencia aún no se observa en las islas.

"Los autónomos no hemos provocado la crisis pero somos los que la estamos pagando" dijo Amor, quién expuso que en las islas, con un total de 105.000 trabajadores autónomos, han tenido desde mayo de 2008, fecha en la que sitúan el comienzo de la crisis, 36.000 bajas aunque destacó que en este periodo se han dado de alta 26.000 nuevos "valientes.

Señaló que a nivel de todo el país, existe un clima de desconfianza generalizado de la sociedad, que es peor, apuntó, que la propia crisis económica.

A esta situación, agregó Amor, hay que ponerle fin y para ello es necesario que el Gobierno español establezca una hoja de ruta y un guión claro y "se deje de vaivenes".

Para el presidente de ATA se precisan reformas de "verdad" en el mercado laboral, en el sistema productivo, en el sistema financiero y una reforma de la administración que suponga su adelgazamiento de su estructura.

Amor consideró que en un momento como el actual se necesitan dirigentes políticos que tomen decisiones y no "ocurrencias".

Sobre la reforma laboral, estimó que es ambigua y confusa, no está a la altura de las estructura empresarial española, trata por igual a todas las empresas y no tiene en cuenta que el 80 por ciento de las empresas en España tienen dos trabajadores.

El presidente de ATA afirmó que los autónomos no han pedido un abaratamiento del despido sino una aclaración de la actual normativa laboral y subrayó que en este aspecto el decreto ley del Gobierno crea más confusión.

Lo que sí han pedido los autónomos, agregó Amor, es un aumento de las partidas destinadas a la formación de estos trabajadores, que suponen el 20 por ciento de la población activa aunque se les destine sólo un 4 por ciento de los fondos de formación.

Lorenzo Amor añadió que también esperaban de esta reforma una mayor flexibilidad para las empresas en materia de negociación colectiva.

Insistió en que la sociedad precisa que los dirigentes políticos tengan las cosas claras y destacó la incertidumbre que existe sobre aspectos como la subida de impuestos o el aumento de la edad de jubilación.

"Peor que la situación económica es el clima de desconfianza que hay que en la sociedad" dijo Amor, quién recordó que desde mayo de 2008 se han dado de baja en toda España 268.057 autónomos, 4.447 en Tenerife y 5.820 en Las Palmas.

El presidente de ATA en Canarias, Juan Carlos Arricivita, dijo que en el Archipiélago hay 90 asociaciones integradas en la federación y señaló que de lo que se trata es de trabajar de forma unida y conjunta para poder salir de esta situación.

Se refirió a la participación activa de ATA en iniciativas como la ley de morosidad o la posibilidad que los autónomos puedan cobrar el desempleo, iniciativa ya aprobada por el Congreso y que se encuentra a la espera de su ratificación por el Senado.