Italia se prepara para vivir hoy una jornada de huelga general contra el plan de ajuste presupuestario de unos 24.000 millones de euros del Gobierno de Silvio Berlusconi, que ha sido convocada sólo por el sindicato mayoritario CGIL, que opina que los recortes son "injustos".

La iniciativa es "a priori" la de mayor entidad de las que se celebran en Italia desde que el pasado 25 de mayo el Consejo de Ministros aprobara el plan para cumplir con las recomendaciones de la Unión Europea (UE).

La CGIL se ha quedado sola en su protesta, ya que no cuenta con el apoyo del resto de las partes sociales ni de los partidos políticos.

La huelga general será de toda la jornada en el sector de la administración pública, después de que el plan de ajuste presupuestario contenga como principal medida la congelación de los sueldos de los funcionarios y la petición de un mayor esfuerzo en los recortes a las administraciones regionales y municipales.

La CGIL también ha convocado cuatro horas de paro a los trabajadores privados, mientras que en el sector metalúrgico la huelga será de ocho horas.

El paro de este viernes puede producir alteraciones en el transporte urbano, donde está previsto que se lleve a cabo durante cuatro horas en algunas ciudades.

Mientras que en el sector aéreo ésta tendrá lugar de las 10.00 horas (08.00 GMT) a las 14.00 horas (12.00 GMT).

La iniciativa sindical irá acompañada además de manifestaciones en varias ciudades.

La excepción serán las regiones de Toscana (centro) y Piamonte (norte), donde el órgano regional del CGIL ha convocado la huelga general para el próximo 2 de julio.

Para la CGIL, el plan de ajuste es "equivocado e injusto" y pide que se modifique para que no vuelvan a pagar "los de siempre, es decir, funcionarios, jóvenes y jubilados y las regiones, la corrección de las cuentas públicas".