La Asamblea General de Caja España aprobó ayer, por mayoría del 96%, la fusión con Caja Duero, que dará origen al octavo grupo financiero de España por cifras de negocio, en una votación en la que se registraron 148 votos a favor, tres abstenciones y tres en contra.

La asamblea se celebró en la sede de la entidad financiera, en León, y a ella fueron convocados 160 consejeros generales.

Previamente, la Asamblea General de Caja Duero, reunida en Salamanca, había aprobado la fusión con Caja España, con 102 votos a favor de los 119 consejeros generales que acudieron a la reunión extraordinaria celebrada en Salamanca, lo que representa el 86%.

En el camino quedarán unas 250 oficinas y 846 trabajadores serán prejubilados. La entidad resultante, con un volumen de activos de unos 46.200 millones de euros, tendrá como nombre técnico "Caja España de Inversiones, Salamanca y Soria, Caja de Ahorros y Monte de Piedad", pero en los próximos dos años buscarán el nombre comercial con el que unificar su imagen corporativa.