La Bolsa de Nueva York estrenó hoy el mes de junio con una sesión agitada, en la que las ganancias se alternaron con las pérdidas, aunque finalmente se impusieron la ventas y su principal indicador bajó más de un punto porcentual.

Después de un largo fin de semana en Estados Unidos, que el lunes celebró el "Día de los Caídos" ("Memorial Day"), la bolsa inauguró hoy semana y mes bursátiles con un descenso del 1,11% en el Dow Jones, del 1,72% en el S&P 500 y del 1,54% en el Nasdaq.

Estas caídas tienen lugar después de que el pasado viernes los mercados neoyorquinos cerraron su peor mes de mayo desde 1940.

Uno de los sectores que más atención atrajo hoy fue el energético, ya que muchos inversores y analistas empiezan a impacientarse ante la falta de soluciones al derrame de crudo que continúa desde hace 43 días en el Golfo de México.

Allí, el hundimiento de una plataforma operada por British Petroleum (BP) ha causado una fuga que cada día expulsa al mar entre 1,9 y 3,8 millones de litros de crudo, según los cálculos de las autoridades, que alertan de que el inicio de la temporada de huracanes, que se promete complicada, podría dificultar las tareas de reparación.

Las preocupaciones sobre este vertido -sobre el que el fiscal general estadounidense, Eric Holder, ha prometido abrir una investigación judicial- se sumaron también a las ya habituales respecto a la solvencia financiera de diversos países europeos.

El euro registró hoy su cambio más débil frente al dólar de los últimos cuatro años, lastrado por el temor a que las agencias de calificación bajen la valoración que otorgan a la deuda soberana de los países europeos.

Los temores hacia la situación macroeconómica en la zona euro se avivaron al conocerse que el desempleo en ese área alcanzó en abril un nuevo récord, al situarse en el 10,1% de la población activa.

Todo ello pesó finalmente más en el ánimo de los inversores que las buenas noticias que les llegaban desde Estados Unidos, donde hoy se supo que el sector manufacturero creció en mayo más de lo que se esperaba (aunque menos que en abril) y que acumula ya diez meses consecutivos de avances.

También se supo que el gasto estadounidense en construcción aumentó en abril un 2,7% respecto a marzo, lo que supone el mayor incremento en una década.

A nivel internacional, Canadá se convirtió hoy en el primer país del G7 en subir los tipos de interés y lo hizo en un cuarto de punto porcentual para situar el interés interbancario en el 0,5% y el de descuento en el 0,75%.

La decisión de elevar los tipos -la primera en ese país en casi tres años- se produce un día después de que se supiera que en el primer trimestre de 2010 la economía canadiense creció a una tasa anual del 6,1%.

"La recuperación de la economía mundial está procediendo, pero es cada vez más desigual entre países, con un fuerte impulso en las economías emergentes, cierta consolidación de la recuperación en Estados Unidos, Japón y otras economías industrializadas, y la posibilidad de una renovada debilidad en Europa", explicó el Banco Central de Canadá.

Los únicos valores del Dow Jones, que integran a 30 de las mayores empresas de Estados Unidos, que subieron hoy fueron Kraft (1,05%), Johnson & Johnson (0,79%), Walmart (0,71%), Microsoft (0,35%), AT&T (0,12%) y Procter & Gamble (0,11%).

En el extremo contrario, las firmas de ese indicador que más bajaron hoy fueron Alcoa (-3,87%), JP Morgan (-2,63%), DuPont (-2,57%), Caterpillar (-2,45%) y General Electric (-2,26%), todas con descensos de más de dos puntos.

Dentro del Dow Jones también bajaron más del 2% las petroleras Chevron (-2,14%) y Exxon Mobil (-2,00%), que se vieron arrastradas por la caída del conjunto de las empresas energéticas.

Ese sector retrocedió un 3,62% en un día en que el euro se cambiaba a 1,2236 dólares a la hora del cierre de la bolsa; la deuda estadounidense subía de precio y la rentabilidad de los bonos a diez años bajaba hasta el 3,26%; el crudo terminó a 72,58 dólares, después de caer un 1,87%; y el oro, por contra, se encareció hasta cerrar a 1.226,7 dólares la onza.