La Bolsa española vivió una sesión marcada por la volatilidad, que cerró con un ascenso del 1,48% gracias al fuerte repunte de los bancos, que le sirvió para cerrar la semana con un avance del 0,99%.

El principal selectivo del mercado español, el Íbex-35, se desmarcó de la tendencia bajista del resto de mercados europeos y avanzó 136,80 puntos, con lo que se colocó en 9.443,50 unidades.

En cambio, poco antes del cierre de la sesión el selectivo alemán retrocedía el 0,65%, en tanto que Londres se dejaba el 0,1%, en línea con París.

Los bancos figuraron entre los valores más alcistas del Íbex-35, encabezados por Bankinter, con un repunte del 4,14%, seguido del Popular, con el 3,83% y, algo más lejos, el BBVA, con el 3,13%.