El ministro de Finanzas griego, Yorgos Papaconstantínu, consideró hoy "inaudito que Alemania bloquee el paquete de ayuda" y sostuvo que la rebaja de la deuda soberana helena por Standard & Poor''s (S&P) a la categoría de los llamados "bono basura" no refleja la realidad.

"La rebaja de hoy no refleja la situación real de la economía griega", afirmó el responsable de Finanzas en un comunicado

Poco después, Papaconstantínu rechazo de plano en el canal de televisión privado MEGA que Grecia pueda reestructurar su deuda o llegar a una situación de impago.

"Muchos de los que apuestan que habrá una bancarrota, perderán su dinero", aseguró el titular de Finanzas, que reiteró que está "fuera de cuestión que Grecia reestructure su deuda. Eso no es negociable".

"Los mercados decidieron, en un campo amplio que está relacionado con la zona euro, ir a la caza sin misericordia de los países más débiles y en esa situación nos hemos encontrados nosotros hoy", aseguró.

El ministro volvió a reiterar la necesidad de acelerar el acceso a los fondos: "Nosotros ya hemos hecho todo lo posible. Es hora de que Europa cumpla con su palabra".

También confió en que "finalizarán en los próximos días" las negociaciones en curso con el Fondo Monetario Internacional (FMI), la Unión Europea (UE) y el Banco Central Europeo (BCE) para un programa de ajuste trianual.

"Con la conclusión se pondrá marcha el mecanismo (de ayuda) y nuestro país podrá continuar cumpliendo sin obstáculos sus necesidades de pagos", indicó.

Las ayudas puestas a disposición por el eurogrupo de 30.000 millones de euros se sumarían a los 15.000 millones de euros ofrecidos por el FMI, que velaría por el cumplimiento de los planes de ajuste.

Alemania, que es el principal contribuyente de las ayudas de la eurozona con 8.400 millones, ha exigido un programa de ajuste fiscal detallado para que Grecia pueda acceder al dinero.