El secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa, apuntó ayer que "no tiene mucho sentido hablar de transferir simplemente el modelo austríaco en España", que consiste en crear un "fondo de desempleo" para cada trabajador. En opinión de Campa, "lo que sí es importante es que hay que buscar fórmulas que faciliten la contratación y atacar la dualidad de nuestro mercado laboral", los dos puntos clave de la última propuesta de reforma laboral del Gobierno.

El Ministerio de Trabajo suspendió "por problemas de agenda" la reunión del diálogo social prevista para ayer con sindicatos y patronal, en la que estaba previsto abordar de nuevo dicha reforma.

Por otra parte, el ex secretario general de CCOO José María Fidalgo mostró sus dudas de que el Gobierno, las patronales y los sindicatos acuerden de forma consensuada la reforma laboral, y lamentó que no se firmara el año pasado.