El sector turístico y de viajes registró un superávit de 1.450,7 millones de euros en enero, lo que supone un descenso del 11,7% con respecto a los 1.643,7 millones de euros alcanzados en el mismo mes del año anterior, según los datos sobre la balanza de pagos difundidos ayer por el Banco de España.

Este resultado fue consecuencia de unos ingresos que llegaron hasta los 2.389,4 millones, un 13,2% menos, y de unos pagos que sumaron 938,7, un 15,5% menos que en enero de 2008.

En cuanto a la balanza comercial del sector servicios hubo un superávit de 1.298,9 millones de euros, un 6,9% inferior a los 1.395,3 millones logrados en el ejercicio precedente como consecuencia del retroceso en un 38,9% del déficit de los otros servicios, hasta los 151,7 millones, lo que pudo compensar la disminución del superávit de turismo y viajes.

Pese a estos resultados, la crisis está afectando al sector que ha visto reducir en lo que llevamos de año el número de turistas extranjeros que visitan España y el gasto que realizan, así como el número de pernoctaciones.

El Banco de España ya advirtió en un informe de que los pagos procedentes del turismo y de los viajes al exterior de los españoles se recortarán durante este año, lo que conllevará una acentuación de la reducción del superávit turístico a pesar de la elevada oferta nacional.

Mientras, el presidente de la Mesa de Turismo, Juan Andrés Melián, afirmó ayer que la Semana Santa contribuirá "levemente" a reactivar esta actividad, aunque pondrá en evidencia la necesidad de adoptar cambios de modelo en la comercialización de la oferta por efecto de la crisis económica.

Por su parte, el secretario de Estado de Turismo, Joan Mesquida dijo que los principales touroperadores de Reino Unido, Alemania, Italia y Francia auguran un año de "incertidumbre" debido a la incidencia de la crisis.

A su vez, la Organización Mundial del Turismo (OMT) pidió ayer para el sector "un papel protagonista en cualquier paquete de medidas de estímulo que se adopten en la reunión del G-20.