Aitor Sanz, uno de los capitanes de la plantilla del Tenerife, envió ayer un mensaje de tranquilidad en un momento de la temporada en el que el equipo blanquiazul no termina de meterse de lleno en el grupo de cabeza de la clasificación.

Pensando más en la gestión que debe realizar el grupo de esta situación que en el entorno, recomendó tener "calma" cuando solo han transcurrido doce jornadas de Liga. "Si empezamos a ponernos nerviosos, podemos cometer errores", advirtió antes de añadir que "el equipo está haciendo bien las cosas y se encuentra en una buena línea, así que hay que insistir en lo que se está trabajando porque las victorias van a llegar".

El centrocampista aseveró que el frío análisis de los números podría confundir al equipo. "Si ahora empezamos a mirar la clasificación y vemos que llevamos varios partidos sin ganar, caeremos en la precipitación y eso nos llevará a cometer errores, y aquí tenemos experiencia en este tema y debemos saber manejarlo", declaró.

Aitor reconoció que "la afición debe exigirle al equipo que esté arriba, porque el grupo está preparado para ello", pero recordó que la competición "es muy larga y no es como empieza sino como acaba". En este sentido, afirmó que "lo importante es seguir una buena línea de trabajo e ir creciendo para marcar diferencias en el momento clave de la campaña".

Además, Sanz opinó que el Tenerife fue ayer "muy superior" a un rival que cuenta con la mejor plantilla de la categoría. "Solo nos faltó tener acierto, que es lo más difícil en el fútbol y es algo que va por rachas. No tuvimos la suerte que sí acompañó al Osasuna en su trabajo defensivo. Pero el camino es el correcto, aunque debemos limar algunos pequeños detalles y seguir adelante", señaló el jugador del Tenerife en la sala de prensa del Rodríguez López.