Los nubarrones se cernieron sobre las opciones aurinegras en el Olímpico de Badalona nada más comenzar el choque. Un parcial de 5-0, que pronto se convirtió en otro más sangrante de 11-2 hicieron temer lo peor, después de las dos derrotas consecutivas que ya traían en el petate los del bosnio Nenad Markovic.

De hecho, los canaristas estuvieron casi cinco minutos sin anotar una canasta de campo. Hacía falta un golpe de efecto. Lo dio Mateusz Ponitka con un triple. El polaco también había sido el autor de los dos primeros puntos del Canarias, desde la línea del tiro libre. Ahí comenzaba la exhibición de un alero desatado, que al final de la cuarta jornada se hacía con el galardón al mejor jugador de la jornada ACB.

Al descanso, la aportación del dorsal 20 aurinegro era de 13 puntos, seis rebotes y 22 unidades de valoración. La exhibición física y de recursos de Ponitka acabó siendo rompedora para la defensa de la Penya. Hasta ocho faltas recibió el protagonista del duelo.

El recital terminó con un rebote providencial a falta de poco más de medio minuto para el final. Un guarismo con el que alcanzaba el doble doble. Así, Mateusz alcanzó los 34 créditos gracias a los 21 puntos anotados -siete de nueve en tiros de campo y cuatro de cinco en tiros libres-, a las 10 capturas -cuatro ofensivas- que no dejó escapar, dos asistencias y un robo. Todo un espectáculo.