Exultante y prudente. Félix Hernández vive los éxitos del equipo que preside tanto como los procesa para que los humos no se acaben subiendo a la cabeza. Y es que tras el triunfo se acordó del San Pablo Burgos, que será el primer adversario canarista en la Liga Endesa en menos de una semana, con el objeto de recordar de dónde viene este CB Canarias.

"Hay que disfrutar la victoria, pero también tener tranquilidad. Ahora nos toca enfrentarnos al Burgos. Pensemos que nosotros éramos el Burgos de la categoría hace apenas seis años. El triunfo nos permite crecer, pero no nos podemos creer que somos otra cosa. Somos los mismos, pero dando pasitos hacia delante", argumentó el presidente canarista.

Y es que para tocar el cielo hay que sufrir en el día a día de trabajo, así como en partidos como el de anoche, en el que la escuadra tinerfeña fue a remolque en bastantes fases del enfrentamiento. "Las cosas que cuestan saben más", manifestó un Hernández que calificó a la final como "perfecta. La cancha ha estado casi llena y al final hemos conseguido otro título. Quién iba a decir que viviríamos este año 2017", se cuestionó.

El presidente destacó a un contrincante con un juego "muy anárquico. Juegan sueltos y han tenido mucho acierto. Por eso se ha puesto complicado. Nuestros jugadores han tenido mucha tranquilidad y al final hemos sido físicamente mejores que ellos y superiores".

Deportivo, el máximo mandatario del representativo quiso dar la enhorabuena a un adversario, el Guaros de Lara, que "tiene muy buen equipo".

Pero sobre todo quiso poner énfasis en la labor del hacedor del equipo, el gerente y director deportivo de la entidad, Aniano Cabrera. "Hay que darle la enhorabuena porque ha vuelto ha hacer una plantilla muy competitiva". Esa de la que pueden seguir dimanando éxitos de calado como los de este memorable 2017.