José Luis Martí empezó la rueda de prensa negando que su equipo esté llegando justo al final del Campeonato. "Todo lo contrario", exclamó sorprendido. Incluso tiró de su repertorio habitual para mostrarse "superorgulloso de cómo hemos trabajado y hemos madurado el partido". En esa alocución inicial, destacó que sus futbolistas fueron "valientes después de diez minutos dubitativos (en la segunda parte)". Se fueron entonces arriba y generaron "llegadas, ocasiones". Todo ello siendo "muy competitivos" ante un buen equipo. De la parte final del choque llamó la atención sobre la "gente de refresco que nos puede cambiar el partido".
La victoria acaba con las dudas generadas por las cuatro semanas sin sumar tres puntos de golpe y la pérdida de posiciones en la clasificación. "Estamos en la puntuación en la que estamos, con ventaja sobre ciertos rivales. Pero queda mucho", esbozó para rechazar la idea de que el "playoff" es una realidad prácticamente asegurada. "La confianza está intacta, nunca la perdimos", aclaró no son reconocer que la de ayer es "una victoria que nos da mucho".
Entrando ya en casos particulares, explicó que Rachid aún "tiene que coger ritmo". Quedó demostrado "en los últimos 20 minutos, en los que ya no podía. Se le subían los gemelos". No obstante, su entrenador resaltó su "capacidad para dar fluidez con el balón" al equipo. Su entrada coincidió con el paso adelante de Aitor Sanz, que actuó en la media punta. "El desgaste de Aitor ha sido tremendo. Recibir a la espalda de los mediocentros, abrir a las bandas, filtrar pases... como si lo hubiera hecho toda la vida", señaló sobre su ubicación. No fue tan generoso con Gaku Shibasaki, del que sí reconoció que "se ha integrado perfectamente". De su presencia en el once detalló que va "analizando el momento" para que esté en el equipo. "Lo importante es que se gane", completó.
Martí quiso valorar "un gol que nos da el triunfo" a la hora de referirse a Choco Lozano, que "ha tenido muchas acciones y no ha finalizado antes. Le ha faltado decisión, pero luego le ha llegado el premio".
En esta ocasión, el que no estuvo en el once fue Vitolo. Pero sí entró en la segunda mitad. "Nunca falla en eso que él nos puede dar", dijo sobre su acceso al terreno de juego en la segunda parte. Sustituyó a Alberto, del que temió su expulsión. "Si somos justos, la segunda falta podía haber sido amarilla perfectamente. Conocemos su ímpetu, no se frena", concretó como justificación para el cambio.
El caso es que el Tenerife se planta en la jornada 38 sin un once definido. Su entrenador no lo ve como algo negativo. "Para mí es una ventaja. Poder elegir en función del rival y de las necesidades del partido y del equipo es beneficioso. La próxima semana ya tendremos que hacer otros cambios obligados. E igual pensamos en alguno más", advirtió.
"Tuvimos opciones y su portero fue de los mejores del partido"
J.J.R., Santa Cruz de Tenerife
Luis César Sampedro es consciente de que su equipo se despidió virtualmente del "playoff" perdiendo ayer en la Isla. "Para nosotros, con la derrota, las dificultades para el playoff son extremas. Tenemos que hacerlo muy bien en los cinco partidos y que el resto de equipos lo hagan muy mal", admitió después de valorar un partido en el que su equipo tuvo "opciones" para llevarse el choque. "Hubo alternativas. Nadie fue dueño al cien por cien. En la segunda parte, el empuje y los cambios del rival y su buen hacer nos hizo sufrir", analizó para advertir que el Lugo estuvo vivo hasta el final. "Tuvimos opciones, como ellos. Ha sido igualado hasta el final y se ha decidido por un detalle. No ha sido lineal. De hecho, su portero fue de los mejores", comentó el técnico gallego.