Donato Gama Da Silva, ejemplo de longevidad como jugador, disputó 589 partidos en la Liga (solo superado en este registro entre los extranjeros por Dani Alves), fue campeón con el Deportivo de La Coruña y defendió los colores de la selección española. Coincidió en Grecia con Vitolo, que ahora lo tendrá a su lado, el próximo día 23 en Garachico, como uno de los invitados estelares del partido benéfico "Amigos de Vitolo".

La afición lo recuerda como jugador. ¿Qué hace ahora Donato?

Con toda sinceridad, agradezco este reconocimiento que me llega con el cariño de los aficionados. Estoy muy agradecido a Dios por haberme dado la oportunidad de jugar en España y defender los colores de España vistiendo "La Roja". Desde que me retiré, tenía la idea de seguir vinculado a este mundo, pero reconozco que cuanto más pasa el tiempo, las cosas se ponen más complicadas. Pero lo importante es no perder la fe y la esperanza. Ahora estoy colaborando con empresas importantes de España que tienen interés de entrar en Brasil y de Brasil a España.

¿Qué echa de menos del fútbol?

El calor, la presión y los aplausos. Amo jugar al fútbol. Cada vez que salía al campo, estaba dispuesto a dar lo mejor por mi equipo y por los aficionados.

¿Guarda algún recuerdo especial de sus visitas a Tenerife?

Yo pregunto: ¿A quién no le gusta venir a Tenerife? Siempre me encanta venir. Poder vestirme de corto y jugar, aunque sea por unos minutos, será una tremenda alegría. Sobre todo por la causa, que es lo más importante.

¿Qué tal como entrenador?

La verdad es que no tuve oportunidades. Estuve trabajando de segundo con Mazinho, en Grecia, con el Aris de Tesalónica. Fue nuestra primera experiencia como entrenadores y la tengo como muy buena, pero cada vez me veo más lejos de entrenar a otros equipos por mi carácter. No me gusta lo que hay por detrás del fútbol.

Mucha gente no sabe que fue entrenador de Vitolo.

Tuve el privilegio de conocer y trabajar con Vitolo. Lo recuerdo como un jugador muy importante dentro y fuera del campo, que no se arruga cuando tiene que tomar decisiones trascendentales para el bien del equipo.

¿Qué le parece la labor que está haciendo al margen del fútbol?

Cuando Vitolo me llamó para invitarme para este partido, no pensé dos veces. Vengo con mucha ilusión de poder colaborar con mi presencia desde La Coruña. Siempre estoy disponible para colaborar con mis amigos en una causa benéfica.

¿Le hace ilusión este partido?

Estoy feliz por formar parte de los Amigos de Vitolo en este evento de fútbol benéfico. Lo que él está haciendo, demuestra lo gran persona que es.

¿Se siente especialmente bien ayudando a los más necesitados?

Me siento especial pudiendo ayudar a los necesitados. Cuando das cosas, también las recibes; y tengo la certeza de que si uno ayuda con alegría, Dios se alegra, porque Dios ama al dador alegre.