El estadounidense Nick Bolletieri, una de las personas más influyentes del tenis mundial, por cuya academia ha pasado cerca de una docena de jugadores que han llegado a ser número uno, manifestó hoy en Bogotá que le gustaría ser recordado por darle esperanza a los niños con este deporte.

Es por ello que su trabajo en la academia gira en su mayoría en torno a los juveniles, que en la actualidad son 13.000, además de universitarios, adultos y profesionales de más de 75 países.

"He sido de buenas por haber estado involucrado con tantos campeones del mundo, pero quiero ser recordado por darle esperanza a los niños que son los que realmente importan", manifestó Bolletieri en un coloquio con periodistas en Bogotá.

El director de la academia, de 84 años, se refirió a varios de los tenistas que han estado en ella y que han llegado o son los mejores del momento, como Serena Williams, María Sharapova, Martina Hingis, André Agassi y Mónica Seles.

Agregó que con los deportes los niños tienen la oportunidad de estar alejados de las drogas, la violencia y las malas influencias.

"Trato de producir campeones, pero también trato de preparar a los niños para los peligros de la vida, droga, violencia y demás", aseguró al advertir también la importancia de ir a una universidad.

Bolletieri reconoció que cada persona es única y por lo tanto la educación es diferente para cada uno.

Destacó la manera como tenía que hablar bajo con André Agassi, o el susto que sentía al dirigirse a Serena Williams "por temor a que me diera un puñetazo" por su tamaño; o la combatividad de Sharapova, que "siempre renuncia a perder", mientras que del chileno Marcelo Ríos dijo: "fue el de mayor talento que tuve".

Bolletieri fundó su academia en 1978 en Bradentton (Florida), hoy conocida como IMG Academy, y asegura que no han vuelto a salir muchos jugadores estadounidense que se ubiquen en los primeros lugares del ránking mundial por la competencia con otros deportes como el fútbol, el baloncesto y el béisbol.

De igual manera destacó la creciente aparición de tenistas de países como China, Serbia, Croacia y Japón que "siempre quieren ser los mejores", puntualizó.