El extremo izquierdo de la selección española de balonmano Valero Rivera Folch declaró que hoy es un día "muy feliz" para él, tanto por alcanzar las semifinales con el equipo nacional como por el éxito logrado por su padre como seleccionador de Catar, a la que ha metido por primera vez en su historia en una semifinal de un Mundial.

"Hoy es un día muy feliz para mí, primero por nuestro triunfo y después por el de Catar. Me alegro muchísimo por mi padre porque se merece estar donde está. Ojalá nos volvamos a enfrentar en la final, sería un sueño cumplido a pesar de que sería difícil para la familia", afirmó el jugador del Nantes.

Rivera Folch, máximo goleador del partido con 10 tantos, destacó que España realizó un partido "muy completo" y elogió la capacidad de "sufrimiento" que tuvo el equipo cuando Dinamarca se puso por delante mediada la segunda parte.

"Este equipo ha vuelto a demostrar que tiene carácter y mucha hambre. Hemos hecho un partido completo, sabiendo mantener el tipo en los momentos más difíciles. Ahora vamos a por Francia", comentó el extremo español.

Rivera no dudó en elogiar a la selección francesa: "Es un equipo que siempre está ahí y que puede tener un mal día pero no dos. Esperemos que ese mal día les llegue contra nosotros. Será clave que ellos no puedan correr y nosotros sí lo podamos hacer".