El entrenador del Barcelona, Xavi Pascual, ha admitido hoy que el equipo encadena una buena dinámica de resultados, pero advierte de que no hay margen para relajarse puesto que mañana el equipo visita "la que seguramente es la pista más difícil de Europa", la del Olympiacos.

"Llegamos bien después de las dos victorias. Es una buena situación, aunque todo puede girar muy rápidamente. Necesitamos hacer un buen partido y utilizar esta buena situación en la tabla para tener confianza", ha manifestado Pascual antes de volar rumbo a Atenas.

El equipo llega al Pireo tras ganar los dos primeros partidos del Top 16 ante el Anadolu Efes (84-65) y el Fenerbahçe Ulker (73-76) y Olympiacos, después de perder estrepitosamente su primer partido de la temporada en la Euroliga ante el EA7 Emporio Armani (81-51) en Milán.

Pese a ello, Pascual no se fía de los griegos, vencedores de las dos últimas Euroligas: "Tuvieron un tropiezo de esos que pasan durante la temporada. Seguro que volveremos a ver esta versión de equipo muy sólido que ha ganado los dos últimos campeonatos".

Este será un partido especial para el alero azulgrana Kostas Papanikolaou, que se enfrentará por vez primer a su exequipo, con el el que ha ganado las dos últimas Euroligas.

"Será un poco extraño. He estado allí cuatro años y, como digo a menudo, intento ser profesional y estar centrado", ha indicado el internacional heleno.

Papanikolaou ha admitido que será un partido emocionalmente intenso. "Será un poco duro volver allí. Son muchos sentimientos y buenos recuerdos", ha concluido.