Su nombre es la gran novedad madridista de la final de Copa del Rey. Es Raúl Albiol, futbolista sin apenas protagonismo esta campaña por el crecimiento de Raphael Varane, que de golpe se ve titular por la lesión del francés y el pulso personal de José Mourinho con el portugués Pepe.

Ni en sus mejores pensamientos podía imaginar Raúl Albiol que iba a jugar una final de Copa del Rey en el fin de una etapa de cuatro años que desea cerrar. Lo intentó en el mercado invernal pero Mourinho no escuchó su petición de salir cedido por las lesiones que de golpe se acumularon y castigaron la zona defensiva. Debía esperar al 30 de junio.

El papel del campeón del mundo y de Europa en el Real Madrid ha ido decreciendo según han pasado las temporadas. La explosión de Varane no solo convirtió en suplente a Pepe sino que hizo correr el escalafón de centrales. Albiol pasó a ser el cuarto. Sus opciones de jugar se vieron reducidas.

En la pasada temporada Varane jugó partidos en el Santiago Bernabéu. Cuando había una salida complicada y bajas en el centro de la defensa, como en el Camp Nou o Reyno de Navarra, la apuesta era Albiol. Todo cambió este año cuando Raphael demostró que pese a su juventud, 19 años, estaba listo para medirse a cualquier rival.

Albiol, que comenzó jugando, pasó a un segundo plano en el segundo capítulo liguero. Fue por una derrota en Getafe, en la que quedó señalado por Mourinho cuando en una acción con clara mano en el control, le hizo perder un duelo en carrera ante Adrián Colunga que acabó en gol. Pasó a un segundo plano en el que se instaló y del que solo salió a la fuerza por las lesiones de Pepe y Sergio Ramos.

En Copa del Rey ha sido la competición en la que el ''Chori'' más ha jugado en su temporada con menos minutos. Y eso que tuvo la mala suerte de lesionarse en la entrada en escena en la competición del Real Madrid. Tras jugar de lateral derecho todo el partido de ida en Alcoy, en el partido de vuelta ante el Alcoyano en el Santiago Bernabéu, sufrió una fortísima entrada nada más comenzar el duelo.

Un minuto pudo portar el brazalete de capitán que estrenaba. El fuerte esguince de tobillo estropeó aún más su inicio de campaña. Su entrenador ya le había desterrado a la banda.

No participó en la eliminatoria ante el Celta pero se resarció ante su exequipo. En cuartos de final, frente al Valencia, jugó enteros los dos partidos y se reivindicó. Demostró a Mourinho que podía tirar de él cuando hiciese falta. Sin embargo, volvió a estar ausente de las semifinales ante el Barcelona antes de asomar como la gran novedad de la gran final frente al Atlético de Madrid. Un total de 271 minutos de 720 posibles.

En la competición doméstica, Albiol es de los jugadores que menos minutos han recibido de la plantilla. Un total de 1.198 repartidos en 16 encuentros, doce de titular y cuatro entrando al campo desde el banquillo de Liga. Un gol al Málaga, dedicado a su mujer en pleno embarazo del que será su tercer hijo, cuando fue el sustituto de Pepe después de las declaraciones del portugués saliéndose del carril de Mourinho.

Raúl Albiol ha jugado en cuatro ocasiones ante el Atlético de Madrid con pleno de triunfos. Especialmente complejo fue el último, cuando lideró una defensa de un equipo plagado de suplentes porque Mourinho reservó a los titulares para buscar la remontada ante el Borussia Dortmund en las semifinales europeas. Junto a Michael Essien, Ricardo Carvalho y Nacho Fernández salieron del apuro con nota.

Provocó elogios públicos de su entrenador. "Albiol siempre ha tenido mi confianza". Es el argumento indemostrable por minutos pero que Mourinho justificará con su titularidad en la final de Copa del Rey. El ''Chori'' está ante su última gran oportunidad de madridista antes de volver a pedir su salida del club en busca de minutos.