Una escapada de tres corredores a la altura de la Cuesta de La Villa resultó decisiva en el devenir del Trofeo Apertura 2013, primera prueba de ciclismo en carretera de la temporada. Jacob Reyes, del Loro Parque, se metió en este corte y ya en meta apenas tuvo dificultades para entrar con una ventaja suficiente por delante de sus acompañantes en la fuga, su compañero de club Adrián Trujillo y el veterano Kiko Álvarez (Foto Vídeo Trébol). Entraron en San Lázaro tras una hora y 29 minutos, con un minuto de ventaja sobre el pelotón principal.

La salida tuvo movimientos desde los primeros metros, en los que Adriano Cordovés (Loro Parque) animó el tránsito de la carrera por la autopista del norte dirección Los Realejos. El norteño cobró una ventaja cercana a los dos minutos, aunque él mismo era consciente de que su plan tenía los kilómetros contados. Por detrás fue el Bambú el que puso a sus corredores a trabajar para alcanzar a Adriano, circunstancia que llegó por el Puerto de la Cruz, aún por la autopista y con los principales espadas planificando la llegada a la Cuesta de la Villa.

Ahí se haría la selección definitiva de los elegidos para previsiblemente llegar juntos a La Laguna y disputarse la carrera al sprint. Joaquín David Martín (Bemekis) sería uno de los grandes beneficiados, pero entonces saltaron los tres integrantes del grupo que a la postre coparon el podio. Arrancaron ante la pasividad de la mayoría de equipos que luego no pudieron responder al ataque en un terreno propicio para rodar a altas velocidades. Finalmente, Jacob Reyes tomó la curva final en primera posición. Por detrás, Joaquín David encabezó el pelotón.

El Trofeo Apertura 2013 se disputó en una sola categoría, a excepción de los cadetes, que salieron desde Santa Úrsula, con éxito para Carlos Enrique Hernández (Peluquerías Bambú), por delante de Samuel García (Vadebicis) y Jorge González (Fonteide). El triunfo en féminas fue para Iriome Maroha (Bentor) seguida de Miranda Santana (Ciclocentro).