Iker Casillas, portero del Real Madrid, estará alejado de los terrenos de juego por una fractura en la base del primer metacarpiano de la mano izquierda durante un tiempo aproximado de entre seis y ocho semanas, según confirmaron fuentes próximas al jugador.

Las pruebas médicas confirmaron ayer la gravedad de la lesión, y, pese a que en un principio se pensó que Casillas solo sufría una contusión, las pruebas posteriores revelaron que sufría una rotura que le dejará fuera de juego durante los próximos dos meses.

"Las fracturas del primer metatarsiano de la mano son un poco conflictivas. Según el trance de la fractura, algunas incluso se operan y se pone un tornillito. Eso depende de cómo sea la fractura, de su alineación, de si tiene un trozo muy separado o si está desplazada o no", aseguraron fuentes especializadas en este tipo de lesiones.