El Gobierno de Canarias quiere promover este año una ley de bibliotecas que unifique el estado y los servicios dispares de los diferentes establecimientos de ese tipo que hay en el archipiélago, según informó ayer la consejera de Cultura, María Teresa Lorenzo.

Propiciar "un funcionamiento común de todo el sistema bibliotecario de Canarias", en el que conviven instalaciones nuevas o renovadas y con fondos, equipamientos y personal adecuados con otras deterioradas, insuficientemente dotadas y abocadas a recortes de fondos y personal, es el objetivo de la iniciativa, explicó la consejera.

Lorenzo precisó que la idea es que la norma se ponga en marcha acompañada de una ficha financiera que permita acometer los propósitos de mejora del sistema que se prevé establecer a través de ella.