El cantautor argentino Andrés Calamaro dijo hoy que quiere "empezar de cero" en la música, componer de forma distinta y reencontrarse con el rock.

"Quiero volver a una sala de ensayo para empezar de cero en la música. En lugar de componer solo con máquinas y que la música vaya en direcciones diferentes, quiero hacerlo con bajista, baterista y la guitarra en la mano porque me voy a encontrar con el rock de vuelta", declaró Calamaro a periodistas en rueda de prensa.

El argentino, que se encuentra en Colombia con su gira de conciertos "Licencia para cantar", confesó que está en una fase distinta de su carrera, en la que no está presente un "creatividad desatada", pues ahora se "preocupa" más por "cantar bien".

"Superé mis expectativas en cuanto a delirio, mala conducta y creatividad desatada cuando sentí que podía grabar y tocar cualquier cosa", acotó el artista.

En ese sentido agregó que tiene "muchos deseos de cantar inspirado" y se mostró orgulloso de haber nadado contra corriente en algunos pasajes de su trayectoria musical.

"Me alegra haber roto mis propios moldes y grabar discos imposibles o hacer dos mil grabaciones que no quiere nadie", apostilló.

Calamaro se mostró inquieto con la postura que tomó el escritor peruano Mario Vargas Llosa frente al Premio Nobel de Literatura otorgado a Bob Dylan, al considerar que el cantante y compositor estadounidense hizo "suficientes méritos" para obtener este "premio metafísico o Nobel oral".

"Es raro. Mario Vargas es de una generación de los Rolling Stones y ya tendría que saber que Bob Dylan no es precisamente un gran cantante, pero sí que tiene categoría literaria", afirmó.

Para cerrar con los temas espinosos, "El Salmón", con algo de humor negro, desaprobó el muro que el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, planea construir en la frontera con México.

Señaló que llevará sus conciertos a México y "probablemente a Estados Unidos, aunque haya que trepar algún muro".

Y agregó: "No creo que sea tan largo como la gran muralla china? Ñes increíble!, ¿cuántos ladrillos serán?".

Calamaro, además, habló de "Volumen 11", el trabajo discográfico que prepara y que incluirá 18 canciones "inéditas y muy interesantes", grabadas en diferentes estudios y distintas semanas.

"Vuelve la distorsión, la corrección política. Hay letras vampíricas, satánicas y apocalípticas, y desprecio a los animalistas. Todo lo que un disco hoy en día tiene que tener", detalló el argentino.

En cuanto su gira "Licencia para cantar", que inició este año en España y cerrará en su natal Argentina, manifestó que es "mucho más que la presentación de un disco", tras elegir diseñar un concierto más íntimo con un formato de percusión, contrabajo y piano que incluye un viaje por clásicos del tango como "Milonga del Trovador", además de los éxitos "Mi enfermedad", "Paloma" y "Los aviones".

"Damos un salto de calidad con un concierto para sentarse y escuchar con características de teatro", dijo Calamaro, quien consideró con algo de ironía que su presentación "no es un verdadero riesgo" y no va dirigida para esos fanáticos que quieren estar de pie, saltar, participar y tomar fotografías para publicar en sus redes.

Por último, confirmó que quiere reeditar su película "Bohemia" y ponerle una voz en francés.