Las típicas toallas de felpa gruesas se sienten como un cariñoso abrazo; sin embargo, han pasado a un segundo plano. Las que causaron furor el año pasado (similares a los pareos) se mantienen, son cómodas y ocupan poco; a la venta están con felpa fina en el reverso. Sin embargo, la última tendencia son las "mandalas". Redondas, coloridas a base de pigmentos naturales y perfiladas con madroños, cintas o borlas.

Calzaremos cholas de goma con suelas de caucho. Decoradas con dibujos siempre son divertidas. Estampadas tipo Liberty es el diseño que propone una conocida marca brasileña; sin embargo, las de "flores de Canarias" serán la estrella de la temporada.

Los bañadores enteros con escotes pronunciados son una apuesta segura para ellas; no significa que esté en desuso el dos piezas. Para ellos vale todo: slips, boxers pero los shorts siempre sientan bien.

Para cubrirse: los caftán. De todos los colores, con cuellos ribeteados y de cualquier tejido que sea fresco: algodón, seda o gasa.

Para la cabezalos panamá. Aunque no nacieron para pasearse por la arena, son un clásico que se mantiene temporada tras temporada. Las pamelas con mensaje son elegantes y sofisticadas. Y los sombreros "gracioseros", la última tendencia siempre y cuando estén customizados.

Las ceretas (cestas de fibras naturales) "súper" decoradas tendrán tiempo de lucirse durante este verano; pronto compartirán protagonismo con los clásicos bolsos de loneta de colores vivos, incluso pintados a mano y rematados con apliques o pasamanería: madroños, piezas de madera o borlas. Los podemos encontrar coordinados con los neceseres.

Los collares con piezas marinas: conchas, estrellas de mar o caracolas. Las pulseras de cuero o cabos, y los brazaletes con fornituras que den movimiento. Tanto unos complementos como otros se pueden cambiar por los "tatus" metalizados; son brillantes y muy favorecedores. Los pendientes también se pondrán bajo los rayos del sol; serán exagerados pero con materiales ligeros.

Las gafas de espejos cuanto más llamativas mejor, y no solo para ellas. En cuanto a formas siempre redondas, de "metacrilato" o colores. Llevarlas con cordones, aunque en principio no lo pueda parecer, dará un aspecto más moderno.

Un buen libro es la mejor compañía; aunque para gustos no hay nada escrito, acercarnos hasta los establecimientos y que sean los libreros los que den las indicaciones siempre será un acierto.

Cada persona hará uso de la crema solar que se adapte a su piel, pero sin duda el fotoprotector transparente en spray es el aliado perfecto.

¡Ha llegado el momento de irse a la playa!