El diseñador Fernando Lemoniez aconseja a los jóvenes creadores, como los que impulsan la moda hecha en Canarias, que se despreocupen de la ropa procedente de Asia "porque si no, se quedan en casa de brazos cruzados", y les pide que "luchen por tener un estilo propio y personal".

Fernando Lemoniez señala en una entrevista que un diseñador tiene que estar seguro de lo que hace y luchar, porque la lucha va a durar "siempre", y por ello enfatiza que las colecciones tienen que tener "identidad, un estilo propio para que sean reconocibles".

Precisamente éste fue el asunto del que ha disertado Fernando Lemoniez en el curso "La Moda. Marca e Identidad" que la Universidad Internacional Menéndez Pelayo ha organizado en Santa Cruz de Tenerife, y en donde consideró que cada diseñador tiene que conseguir que su colección, a través de sus tejidos, estampados y formas, de una información concreta y personal.

"Es la única manera de conseguir una identidad y que sea reconocible en el mundo", precisa el creador de la firma Lemoniez, fundada en 1997, para quien las revistas especializadas trabajan sobre las tendencias y por ello parece que la moda actual presenta propuestas muy similares.

Por el contrario, opina, con la incorporación a la moda de internet y las tecnologías hay un "plus" que añadir a la identidad física del traje", pues se cuentan historias -incluso en la publicidad de los diseños- y en los desfiles la iluminación y la puesta en escena amplían lo que puede transmitir la ropa.

Ese "plus" de renovación es lo que demanda Lemoniez en las pasarelas españolas de moda, que percibe como "un poco estancadas y anticuadas" en su presentación, como el caso de Cibeles, que se ha quedado en desfiles "puros y duros" como hace quince años, cuando ahora las colecciones en Italia y en París se presentan en diferentes formas y espacios.

También pide a la moda española que ceda el paso a firmas que realmente tengan detrás una estructura empresarial, un aval de exportación "y un interés", pues en muchas pasarelas hay diseñadores "que hacen una colección y ahí se quedan, no van más allá".

"Eso no debería ser así", advierte el creador, quien no se muestra partidario de las subvenciones públicas a la moda porque al final los diseñadores "se acomodan, se cubren ciertos gastos y no tienen tanta necesidad de facturar".

Afirma que el dinero público tiene que estar para "otros servicios" y lo que es básico es encontrar un apoyo social, "que se defienda lo nuestro".

Sí se muestra partidario de que haya iniciativas de apoyo a los diseñadores que empiezan como es el caso de Tenerife Moda y Canarias Moda Cálida en Gran Canaria,

Al respecto, indica Fernando Lemoniez que cada vez es más frecuente encontrar pequeñas tiendas de diseñadores, de donde saldrán los futuros grandes creadores y por ello "es importante potenciar esa cultura del vestir".

No hay que olvidar que la moda es el reflejo de la sociedad y los diseñadores deben percibir lo que las mujeres "necesitan", aunque admite que a veces "hay poco riesgo, lo no nos permite ir algo más allá" también entre los clientes, lo que no ocurre en ciudades como Londres.

"La moda nos tiene que apasionar pero no podemos ser víctimas de ella", resume el diseñador natural de San Sebastián, para quien transmitir un estilo propio y vestir "a tu manera" es lo mejor que puede hacer una persona.

Es lo que intenta defender con la línea infantil que creó hace dos años, "Señorita Lemoniez", que ha tenido gran repercusión en Estados Unidos, Italia, Oriente Medio y Corea, entre otros países.

Lemoniez no se había planteado diseñar ropa infantil y la idea surgió con sus sobrinas "pequeñitas", y lo que tuvo claro es que no le atraían "los nidos de abeja y estampados de payasitos y muñequitos", sino darle "una gracia" en el estampado y el colorido, con formas que muchas veces extrae de su propia colección adulta.

Sus fuentes de inspiración "son infinitas, nunca se agotan, como los manantiales de agua" y en su caso proceden de la pintura y artes decorativas de la primera mitad del siglo XX, como el alemán Josef Albers y su estudio sobre el color, el cine clásico y la música.

"Toda, pero en especial el pop anglosajón", aunque matiza que la música depende del momento del día, igual que la ropa que se elige.

En cuanto a los diseños que viste la Reina Letizia, opina que España es un país "realmente complicado y siempre la van a criticar porque "vista de uno o porque vista de diez".

Está bien que se haya decantado por un diseñador con el estilo que a ella le gusta, afirma Lemoniez en alusión al modisto Felipe Varela, pues si la Reina empieza a seleccionar entre diferentes propuestas "tendría las puertas del palacio desbordadas de todos los diseñadores protestando por qué otros sí y ellos no".