Entramos en diciembre... Mes entrañable, de fiestas, nostalgias, reencuentros. Cuando quitamos la hoja del almanaque y aparece el mes de diciembre, uno siente alegría, algo de tristeza, ganas de quedar con la gente amiga en la calle, tan animada en estas fechas, con esa iluminación que dan ganas de pasear por las mismas, viendo los escaparates, los cuales derrochan imaginación, con todos esos artículos llamativos, unos necesarios y otros no, y estos últimos no serán prácticos ni "una inversión" pero, aportan belleza, o nos sentimos contentos por tenerlos, y así mil cosas.... Estas Navidades se presentan más tranquilas, en general; la mayoría de nosotros, a estas alturas, valoramos más el reunirnos a pasar un rato agradable y echar unas risas, que todo aquel consumismo exagerado que era hasta un agobio, las cosas a la fuerza están yendo a su sitio, falta alcanzar ese equilibrio en el que a nadie le falte lo necesario para vivir con dignidad y, junto con una salud que nos permita hacer nuestra vida y algo de amor y compañía, todo lo demás son extras y bien recibidos sean. Disfrutemos de esos pequeños momentos mientras podamos, viviendo el ahora, el mañana no se sabe, y el pasado... ya pasó. Empecemos a organizar nuestros menús para las fiestas, que si truchas, que si una carne al horno, unos canapés... No hace falta un gran gasto, con unas recetas sencillas, bien presentados los platos, una mesa arreglada con gracia, con unos adornos aquí y allá, que los podemos hacer con plantas naturales y todo lo que a nuestra imaginación se le ocurra... Crearemos un ambiente agradable y bonito, que junto con buena compañía y ganas de pasarlo bien, pues...¿para qué más? Y así les paso hoy esta sencilla receta que queda muy rica. ¡Que la disfruten!

Ingredientes: Un filo de carne de res de unos 2 kilos, 80 gramos de ciruelas pasas, 1 lata mediana de piña en almíbar, 1 manzana grande (mejor de la variedad reineta, de sabor ácido), 1 cebolla grande, 8 dientes de ajos, 1 pimiento rojo, 2 ó 3 zanahorias, 1 vaso de vino blanco, pimienta negra en grano, 1 pastilla de caldo de pollo, pimentón, aceite, sal gorda, 1 cucharada de maicena (opcional).

Elaboración: Con un cuchillo le hacemos al filo unas cortadas profundas por diferentes sitios. A continuación mechar el filo, introduciendo en las cortadas, ciruelas pasas, trozos de piña en almíbar y trozos de manzana (todo picado y mezclado). Untar el filo con un majado hecho con ajos, sal y pimentón y dorarlo en aceite puesto en un caldero al fuego junto con la cebolla grande troceada, el pimiento y las zanahorias troceados, el vino blanco, el jugo de la piña, la pastilla de caldo de pollo, pimienta negra molida, algo de sal (probar antes ya que la pastilla de caldo aporta sal) y un poco de pimentón. Dejarlo cocer y darle vueltas de vez en cuando para que no se pegue y se haga bien por todos lados. Si la salsa quedase demasiado líquida, la espesaremos agregándole una cucharadita de maicena disuelta en un poco de salsa fría, removiendo con una cuchara de madera hasta que espese. Se deja cocer hasta que la carne esté tierna. Se presenta el filo cortado en ruedas con una parte de la salsa triturada y colada añadida por encima de la carne y el resto en salsera. ¡Qué platos... para mojar pan!