La Orquesta Sinfónica de Tenerife se reencuentra esta semana con el que Víctor Pablo Pérez considera "nuestro guitarrista de cabecera", el músico cubano nacionalizado estadounidense Manuel Barrueco, con el que el próximo viernes interpretará "Medea", de Manolo Sanlúcar, en el Auditorio de Tenerife. Esta nueva colaboración de solista y orquesta fue presentada ayer en el Cabildo, cuyo Patronato de Música dedicará el concierto a la profesora del Conservatorio Carmen Rosa Zamora, según avanzó el coordinador insular de Cultura, Cristóbal de la Rosa.

"Medea", que la orquesta tocará por primera vez, será el punto de partida de un programa que se completará con otra obra inédita en los atriles de la OST, Manfred", de Xavier Montsalvatge, y, la Sinfonía número 15 de Dmitri Shostakovich.

Barrueco admitió que echaba de menos Tenerife, pero también a la orquesta (con la que realizó una gira por Alemania hace ocho años) y a Víctor Pablo, en su opinión "uno de los grandes directores".

El guitarrista americano detalló la gestión del proyecto en torno a la obra de Sanlúcar, popular músico gaditano con el que ha coincidido en varias ediciones del Festival de Guitarra de Córdoba.

"Cuando se me preguntó por la posibilidad de tocar un concierto de guitarra con muchos elementos flamencos, me di cuenta de que no había muchas obras de estas características. Pensé en Moreno Torroba y en Manolo (Sanlúcar), al que le había escuchado esta pieza, para mí bella y honesta, con la Orquesta de Córdoba. Le pedí permiso para tocarla y me lo dio". Ahora bien, detalló, "había que salvar dos problemas, el primero es que originalmente la obra era un ballet; además, estaba concebida para dos guitarras, y tuvimos que ensamblar las dos voces, pero creo que el resultado ha quedado muy bien".

Por lo tanto, será una suite de concierto sobre el ballet "Medea" lo que se escuchará este viernes en la Sala Sinfónica, donde al día siguiente se llevará a cabo la grabación de la obra.

La OST y su director honorario homenajearán a Xavier Montsalvatge en el centenario de su nacimiento con la ejecución de "Manfred". "Una obra de juventud, también escrita para ballet", lo que, a juicio de Víctor Pablo, "da sentido al programa". El maestro burgalés retomará en la segunda parte a uno de sus músicos favoritos, Dmitri Shostakovich, representado por su última sinfonía, el opus 141 de su catálogo, un monumento sonoro con ecos de Rossini, Wagner y el propio Shostakovich.