"La crisis se supera a base de una creatividad obligada por la necesidad, y, sobre todo, con la fórmula de los norteamericanos a la hora de vender: diez por ciento producto y noventa por ciento márquetin". Lo afirma Pablo Martín, un artista polifacético dada su condición de actor, director, productor, guionista y modelo. Este canario-venezolano de 39 años, con orígenes en La Orotava, tiene claro que "Venezuela es mucho más que telenovelas y mujeres bellas que aspiran a ser misses". Tras pasar varios meses en la isla, donde ha rodado un mediometraje, "Anoréxica Ana", actualmente en proceso de postproducción, Martin marchará el próximo día 11 a tierras americanas en busca de exteriores para su primer largometraje: "El lenguaje de las almas".

¿Qué balance hace de este nuevo reencuentro con su tierra?

Tengo una relación de ida y vuelta. Hemos consolidado el proyecto del CIEDAC, con resultados como "Anoréxica Ana". Además, he encontrado localizaciones para "El lenguaje de las almas", una historia basada en hechos reales, que toma el amor como eje en una sociedad materialista como la actual y que resalta por encima de todo los valores humanos.

Actor, director, productor... ¿En qué faceta artística se encuentra más cómodo?

Yo me considero un artista integral. Cuando sientes el arte y te ves con capacidad de crear y desarrollar propuestas vas creciendo. Primero eres actor y luego llegas a la dirección y a la producción casi sin darte cuenta. Es como una especie de necesidad de ir cubriendo etapas. Dirigiendo entiendes mucho mejor la actuación.

Acaba de culminar un mediometraje y ahora afronta su primer largo. ¿En qué momento artístico se encuentra?

Usaría la palabra madurez. Estamos en pleno proceso de postproducción de "Anoréxica Ana" y esta misma semana saldrá a la luz su trailer promocional. El estreno está previsto para mediados de febrero y será en Tenerife. Respecto al largometraje, se ha unido a la iniciativa la productora canaria Blackstone Film Production. Iré ahora a Venezuela y Miami para cerrar acuerdos con actores latinos y confirmar localizaciones del Caribe venezolano como las de la isla de Coche. Además, se grabará en Tenerife, en el Teide y el Sur, Londres, Madrid y Caracas. El elenco de actores será internacional, con varios españoles, entre ellos alumnos del propio CIEDAC.

¿La crisis es un acicate para agudizar el ingenio y la creatividad?

Afecta al potencial económico con el que puedes contar y eso influye en la calidad. Pero también te lleva a descubrir campos insospechados en la creación, a buscar alternativas como la cooperación o el trabajo en equipo para sacar adelante los proyectos. Fomenta alianzas con empresarios para dar cabida a sus marcas en el mundo audiovisual. En definitiva, nuevos caminos, mucha creatividad y la fórmula de los Estados Unidos para vender: 10% de producto y 90% de márquetin"

¿Cómo valora la labor de formación de actores de CIEDAC?

Estamos satisfechos tras años de arduo trabajo. Quería orientar actores hacia el trabajo específico en televisión y cine. En Canarias hay cantera de actores, pero falta experiencia ante las cámaras. CIEDAC pretende superar la idea de tener que emigrar para triunfar con otra fórmula mágica: talento, constancia y contactos.

¿Podría ser Tenerife un gran plató natural de cine?

Tenerife y Canarias cuentan con condiciones idóneas para grabar producciones televisivas y cinematográficas. Existe un importante mercado, el latinoamericano, donde dichas producciones pueden tener salida. Hay que dar a conocer esos posibles escenarios. Aquí hay paisajes, microclimas y contrastes. Lo ideal para una producción cinematográfica. Hay que ser innovadores, contar con un firme apoyo institucional, mezclar lo público y lo privado e instar a los productores a arriesgar y dar el paso. Una industria se crea sumando los esfuerzos de todos. Lo veo posible, solo falta voluntad para lograrlo.

¿Cómo ve a su país, Venezuela?

Como algo más que una tierra de telenovelas y mujeres bellas que aspiran a ser misses, como algunos creen todavía. Lo segundo, por fortuna, nunca falta, es consustancial a las venezolanas. Lo primero ha ido en declive y lento descenso tras la explosión de los años ochenta del siglo XX y nos han superado Colombia o México, sobre todo tras el cierre del canal RCTV. Pero Venezuela es mucho más. Ahí está el auge de los humoristas, porque para nosotros el humor es cultura y una clave de vida. Hay un auge del teatro, sobre todo de la parodia y me parece muy sano. Por otro lado, existen fenómenos como el de las orquestas que demuestran que no hay que quedarse en los estereotipos. Se está haciendo una gran labor que no llega fuera y la imagen que da el país no es la que los venezolanos merecemos y nos gustaría ofrecer al mundo.

Currículo de primer nivel

Pablo Martin (Caracas, 1972) se ha convertido en una de las personalidades más destacadas de la industria audiovisual latinoamericana, tanto delante como detrás de las cámaras. En Tenerife ha creado el Centro Internacional de Estudios para el Desarrollo Artístico en Canarias (CIEDAC), la primera entidad del Archipiélago especializada en la formación integral de actores. A los nueve años sus padres, emigrantes tinerfeños, decidieron regresar a la isla y se instalaron en La Orotava, donde comenzó sus estudios de protésico dental. Cuando ya había abierto su propio laboratorio comenzó a dar sus primeros pasos como modelo de anuncios. El cineasta ha dado vida a personajes de algunas de las más relevantes producciones televisivas españolas como "Farmacia de guardia" y "Médico de familia". En paralelo, ha desarrollado la carrera de actor en la pantalla grande y su imagen ha aparecido en más de cuarenta anuncios publicitarios.