Rogelio Pérez Vilar, actualmente educador en la prisión Tenerife II, acaba de autoeditarse la obra "Y amarás las nubes grises. Memorias, sin censura, de un funcionario de prisiones", libro en el que narra sus experiencias en los diferentes centros penitenciarios en los que trabajó durante su vida.

Este licenciado en Sociología y Ciencias Políticas por la Universidad Complutense de Madrid no solo muestra en este libro, con toda su crudeza, humanidad y matizado humor, "sus conocimientos y vivencias, sino que lo hace además sin concesiones al poder político, judicial o a sus propios compañeros, revelando una visión diferente a la ofrecida por los medios de comunicación de la época. Sin embargo, no deja de ser un alma sensible, que sufre, ama y busca su destino en este mundo".

Las más de doscientas páginas que integran la obra, volumen que comprende el periodo comprendido entre los años 1978 y 1984, describe en primera persona y con todo lujo de detalles una serie de situaciones que vivió en el Centro Penitenciario de Detención y Cumplimiento de Santa Cruz, en la Modelo de Valencia, en Carabanchel, en la prisión de máxima seguridad Meco (Madrid) y en el Penal de San Antón en Cartagena. También ha trabajado en la Modelo de Málaga, en Font Calent (Alicante), en el Penal del Puerto I y II en Cádiz y en Soto del Real.

Miguel Sáez de Miera, prologuista de la obra, asegura que "es todo un honor poder presentar esta obra estremecedora no solo por su ágil narrativa, sino porque parte de una realidad cruda y a veces dura en su estado más puro".

En este sentido, valora el mérito del autor, que "ha sabido plasmar los valores humanos más profundos, que están por encima de un simple y triste ambiente penitenciario. El amor, la ilusión, la esperanza, la justicia... florecen allá donde las leyes no llegan, factores que se interrelacionan con sus variados y complejos personajes para al final dejar al lector un optimista sabor de boca que dignifica la existencia humana".