El Auditorio Pirámide de Arona, ubicado en el complejo Mare Nostrum Resort de Tenerife, alberga los últimos días del espectáculo ''Alma'', un trabajo en el que la coreógrafa Carmen Mota y su hijo Joaquín Marcelo han recuperado la esencia de la danza.
Tras más de 300 actuaciones, el día 25 de mayo será la última función de la décima coreografía creada por la bailaora y su hijo para el Auditorio Pirámide de Arona. Con esta obra han dado un giro a su trayectoria dejando atrás los musicales y volviendo a sus inicios, al lenguaje de la danza en estado puro.
''Alma'' fusiona nuevos géneros y recupera las influencias latino-americanas en la danza española con los ''cantes de ida y vuelta'', un estilo que abarca desde las guajiras cubanas hasta la bamba mejicana.
Durante casi dos horas, los 30 bailarines, guiados por una variada selección musical, entremezclan diferentes estilos de la danza española con bailes más contemporáneos para finalizar con las raíces de los palos del flamenco. Así, se recuperan bailes tradicionales como las sevillanas corraleras, acompañadas tan sólo por la percusión y repiqueteos de instrumentos caseros.
Actualmente, la coreógrafa y su hijo se encuentran preparando un nuevo show que tiene previsto estrenarse a mediados del mes de junio. Un espectáculo con el que la artista celebrará sus quince años en el escenario de Pirámide de Arona y en el que mostrará, una vez más, todos sus conocimientos en el mundo de la danza para continuar sorprendiendo a su público.