Carlos Saura, Álex de la Iglesia, Fernando Trueba e Icíar Bollaín son algunos de los protagonistas de la 21 edición del Festival de Cine Español de Nantes, ciudad del oeste galo que presume de contar con los habitantes más cinéfilos de Francia, con permiso de París.
En presencia de Trueba, que preestrenará en Francia "Chico y Rita", la segunda localidad francesa con mayor tasa de asistencia por habitante a las salas de cine entrega mañana los premios de un certamen especialmente aplaudido por el público menor de 25 años.
"En España es más difícil proyectar hoy cine español que en Francia" y lograr una aceptación similar a la del festival en la península sería complicado porque "uno no puede ser profeta en su tierra", aseguró Pilar Martínez-Vasseur, directora de un evento que atrae cada año a unos 22.000 espectadores.
Más del 60 por ciento de aquellos que se dejan caer por los cines de este festival entre el 24 de marzo y el 5 de abril tienen menos de 25 años. Un logro que responde al trabajo que hacen las instituciones para formar al público, explicó.
"Esa libertad de tono, esa autocrítica constante" y la humildad de los directores españoles favorece el flechazo entre el público francés y los creadores transpirenaicos, agregó Martínez-Vasseur, fundadora del festival.
Como ejemplo de cercanía, se refirió a De la Iglesia, un habitual de la fiesta del cine de Nantes, que siendo "un tío reconocido, da la impresión de que es un novel hablando con el publico", lo que ayuda a meterse a la audiencia en el bolsillo.
Trueba, Pedro Almodóvar o De la Iglesia están considerados en Francia como "directores jóvenes", a diferencia de lo que ocurre en España, donde hay personas de veinte años que creen que el director de "Volver" es "para gente mayor", resumió Martínez-Vasseur.
No en vano, el último film de Álex de la Iglesia, "Balada triste de trompeta", abarrotó este jueves el cine de 330 butacas donde se proyectó la cinta del director bilbaíno, uno de los seis largometrajes a concurso.
Su impactante thriller rivaliza en la sección oficial con "Pa Negre", de Agustí Villaronga, "No controles", de Borja Cobeaga, "La mosquitera", de Agustí Vila, "La mitad de Óscar", de Manuel Martín Cuenca y "Elisa K", de Judith Colell y Jordi Cadena.
"Si no hubiera sido director de cine, me habría hecho asesino", bromeó al término de la sesión el ex presidente de la Academia del Cine, haciendo un guiño a uno de los diálogos de su película ante el centenar de jóvenes que se quedaron al coloquio.
Además de llevar a la gran pantalla 70 filmes inéditos en Francia, el festival apuesta también por el cine documental.
Uno de los platos fuertes de ese género es "Ciudadano Negrín", realizado por Sigfrid Monleón, Carlos Álvarez e Imanol Uribe a partir de imágenes personales del ex presidente de la Segunda República española.
En catalán, entre otras, se proyectó la gran vencedora de los últimos Goya, "Pa Negre", mientras que en el marco de "La ventana vasca" se llevará a la costa francesa la cinta de animación "Ondar Ahoak", de Ángel Aldarondo, o "El mal ajeno", dirigida por Daniel Sánchez Arévalo, producida por Alejandro Amenábar e interpretada por Belén Rueda y Eduardo Noriega.
La nueva hornada de directores, como el hijo de Fernando Trueba, Jonás, o el ganador del Goya al director novel, David Pinillos, también han logrado conquistar al público galo con los largometrajes "Todas las canciones hablan de mí" y "Bon appétit", respectivamente.
De las 200 proyecciones previstas hasta el próximo martes, más de una treintena compite en la sección oficial y en las cinco paralelas del festival.
La actriz española Ángela Molina recibe en esta ocasión el homenaje especial de la ciudad de Nantes, donde vivió dos años de joven, por lo que la programación incluye la proyección de varias de sus películas, como "Carne Trémula", de Pedro Almodóvar, y "Ese oscuro objeto de deseo", de Luis Buñuel.
Además, la edición de 2011 dedica tres ciclos temáticos a la familia, a los derechos humanos y a la memoria e historia, y destaca a la ciudad de Madrid como invitada de honor.