"Al Perú lo llevo en las entrañas", aseguró hoy el escritor Mario Vargas Llosa, en el discurso de aceptación de Premio Nobel de Literatura en la Academia sueca.

Ante un auditorio que esperaba al literato con más de una hora de antelación, Vargas Llosa hizo pública esta declaración al país donde nació, creció, se formó y vivió "aquellas experiencias de niñez y juventud que modelaron" su personalidad y fraguaron su vocación.

Una vocación que le ha llevado a ser reconocido con el más prestigioso premio de la letras y que el próximo viernes recogerá de manos del rey Carlos Gustavo de Suecia.

El autor de "La casa verde" aseguró que en Perú amó, odió, sufrió y soñó y lo que ocurre en ese país le afecta, le conmueve y exaspera más "que lo que sucede en otras partes".

Bajo el título "Elogio de la lectura y la ficción", el escritor, de 74 años, pronunció un discurso de una hora de duración que congregó tanto a su esposa, Patricia, sus hijos, Morgana, Gonzalo y Alvaro, y a sus seis nietos, como a autoridades de Perú y España y miembros de la comunidad peruana en Suecia.

Muchos de ellos, portando una bandera peruana, guardaron una larga fila para hacerse con una de las entradas que, a un precio de unos 40 euros o 35 dólares, permitían la entrada a la lectura de Vargas Llosa. Mientras otros tuvieron que seguir la exposición en una pantalla habilitada en la cercana Fundación Nobel.

Vargas Llosa recordó que algunos compatriotas le acusaron de "traidor", y a punto estuvo de perder la ciudadanía cuando, durante la última dictadura, pidió a los gobiernos democráticos del mundo que "penalizarán al régimen con sanciones diplomáticas y económicas, como lo ha hecho con todas las dictaduras de cualquier índole".

Una petición que, aseguró, la volvería hacer "si -el destino no lo quiera y los peruanos no lo permitan- el Perú fuera víctima una vez más de un golpe de Estado que aniquilara nuestra frágil democracia".

A la hora de describir a su país, el laureado escritor dijo que para él Perú es Arequipa, donde nació pero nunca vivió, la "Piura del desierto, el algarrobo y el sufrido burrito", el colegio San Miguel y el teatro Variedades y la redacción del diario "La Crónica", donde veló sus primeras armas de periodista.

También el "Perú es Patricia", dijo el escritor al referirse a su esposa y madre de sus tres hijos, que recibió el aplauso de la sala cuando al autor de "La casa verde" se le quebró la voz.

En su discurso, titulado "Elogio de la lectura y la ficción", Vargas Llosa también reflexionó sobre la conquista de América y señaló que "desde hace dos siglos la emancipación de los indígenas es una responsabilidad exclusivamente nuestra la hemos incumplido".

"Ella sigue siendo una asignatura pendiente en toda América Latina. No hay una sola excepción a este oprobio y vergüenza", concluyó.