Sin glamour pero con un público ansioso por redescubrir los paisajes de Tenerife en la gran pantalla: así se vivió anteanoche en Santa Cruz el preestreno a escala nacional de "Clash of titans" ("Furia de titanes"), remake del filme homónimo de 1981 que recrea la odisea mitológica de Perseo en la guerra desencadenada por los dioses del Olimpo contra la ciudad de Argos.

Medio millar de personas asistieron a esta presentación en los cines Yelmo Cineplex de la capital tinerfeña, escenario de una sesión precedida por las palabras del vicepresidente primero del Cabildo y consejero insular de Turismo, José Manuel Bermúdez, quien hizo hincapié en que para Tenerife "la película ya está rentabilizada", tanto por los 5 millones de euros que el rodaje ha dejado en la Isla como por la difusión internacional que ésta va a obtener gracias al filme.

Bermúdez se felicitó por el hecho de que Hollywood haya vuelto a poner sus ojos en Tenerife cuarenta y cuatro años después de "Hace un millón de años" (que en realidad era una producción británica de la Hammer) y por la promoción que comportaba para la Isla como destino turístico.

El responsable de Turismo de Tenerife -que preestrenó el filme junto a la multinacional Warner Bros.- subrayó el hecho de que los espacios protegidos de la Isla, en particular el Parque Nacional de Teide, no habían sufrido daño durante el rodaje, llevado a cabo "con todas la garantías" y con participación de personal isleño.

Precisamente, a falta de estrellas y de miembros del equipo de producción anglonorteamericano -que sí asistieron en la víspera a la premiere mundial celebrada en Londres-, "Furia de titanes" estuvo representada en la sala por los componentes de la productora tinerfeña Sur Film Production & Services, que recibieron aplausos al desfilar sus nombres en los créditos de salida.

Antes de la proyección, el fantasma de "Bienvenido Mr. Marshall", condenado a reaparecer periódicamente, fue conjurado por una serie de vídeos que a modo de enlatado divulgaban los elogios del productor Kevin de la Noy, de los actores Sam Worthington y Mads Mikkelsen y del diseñador de producción Martin Laing, quien se refirió a Tenerife como la "joya de la corona", escogida tras el exhaustivo rastreo llevado a cabo en el buscador Google Earth.

El resultado deja sensaciones encontradas. En la parte positiva, se dirigen al fin múltiples e importantes focos hacia un plató natural que hasta ahora (y por razones ajenas al mundo del cine) no había sido aprovechado ni "explotado" en la gran pantalla.

Sin embargo, los parajes de Tenerife -que ocupan el 20% del rodaje, por delante de Gran Canaria y Lanzarote, Gales, Etiopía e Islandia, que suministran los restantes exteriores- lucen en esa gran pantalla travestidos por los efectos digitales y por la mirada estándar de un director, Louis Leterrier, más preocupado por la factura técnica que por explorar como un sentido fantástico los espacios utilizados como telón de fondo.

Irregular desde el punto de vista narrativo, la película avanza por impactos visuales y gracias a recursos importados de la publicidad. Por otro lado, el espectador que prescinde de las gafas tiene la impresión de que las Tres Dimensiones no estaban en el concepto original del filme y que la irrupción en el mercado de "Avatar" ha forzado la reconversión final del proyecto en 3D.

En cuanto a los efectos especiales, no pocos medios se han apresurado en subrayar la superioridad del nuevo filme sobre el original dirigido por Desmond Davis, ignorando que éste supuso el testamento del gran maestro de la animación Ray Harryhausen, cuya Medusa deja malparada a la gorgona de videojuego presentada ahora. La visión del Olimpo tampoco destaca por su originalidad, con sus dioses encasillados y un Zeus envuelto, cómo no, en luces centelleantes.

Frente a todo ello, un excelente diseño de producción (Laing es claramente el gran vencedor de la apuesta) y momentos espectaculares, como la irrupción de Hades en la corte de Argos o el rescate de Andrómeda por el hijo bastardo de Zeus, que combate al Kraken en una escena importada del "King Kong" de Peter Jackson.