La artista Christina Rosenvinge presentará esta noche su último trabajo ''Tu labio superior'' en la sala Bikini de Barcelona, según informa su web oficial.

Su nuevo disco, considerado por muchos como su mejor trabajo, es radicalmente diferente a toda su obra anterior. No tiene nada de lo naíf que rezumaban Álex y Christina o Christina y los Subterráneos, ni se encierra en la introspección y total ausencia de buen humor de su posterior andadura.

Después del disco en colaboración con Nacho Vegas, a la autora de ''Chas y aparezco a tu lado'' le resultaba muy difícil volver a hacer un disco en inglés. Rosenvinge estará mañana acompañada con una gran banda: Chris Brokaw (Come), Steve Shelley (Sonic Youth), Jeremy Wilms y Charlie Bautista.

''Tu labio superior'' tiene mucho de regreso a las estructuras pop de sus discos de los 90; y eso sin prescindir de la complejidad y madurez de su trilogía en inglés, la de ''Frozen Pool'' (2001), ''Foreign Land'' (2002) y ''Continental 62'' (2006), quizás una secuela, 11 años después, del ''Cerrado'', con la ventaja de la experiencia o de ''Mi pequeño animal'' (1994), porque desde aquél no publicaba Rosenvinge un álbum completo en castellano.

En Nueva York, Rosenvinge produjo diez temas propios y uno prestado: el blues de Leroy Carr ''In the Evening'', según la versión que escuchó tocar a Brokaw y Jeff Farina en el Tanned Tin del 2007.

Otras canciones, ''Negro cinturón'', ''Anoche'', ''Animales vertebrados'', suenan a cabaret berlinés, música para supervientes, irónica, ligera y al tiempo brutal. En ''Eclipse'', como en el inolvidable ''Tok tok'' de ''Continental 62'', la voz cumple una función más rítmica que melódica.

Los juegos de poder entre amo y esclavo, pero también un despecho teñido de nostalgia (''La distancia adecuada'', ''Nadie como tú''), el episodio de furia hormonal (''Tres minutos''), un solipsismo fatal (''Las horas'') o el caos sentimental (''Anoche'') conforman el nebuloso paisaje literario.