Hoy, 10 de abril, es una fecha en la que se celebra, en más de 90 países de todo el mundo, el Día Internacional de la Homeopatía. Esta conmemoración mundial es un momento para la reflexión sobre los importantes avances obtenidos en los últimos años y sobre los objetivos que aún faltan por alcanzar.

La homeopatía es una opción de medicina natural que utiliza medicamentos de venta en farmacias y que cuenta con unos tratamientos que presentan muy pocos efectos secundarios. Es una terapia muy útil para adultos y en cualquier edad de la vida, y que se encuentra especialmente indicada en niños, embarazadas y personas mayores, dada la alta seguridad de sus tratamientos. Es una de las terapias más reconocidas de las denominadas como terapias médicas no convencionales y también como medicina integrativa.

Cabe preguntarse desde cuándo podemos encontrarla en Canarias y, en este sentido, su desarrollo fundamental se encuentra a partir de 1978, es decir, bajo el sistema democrático y, especialmente, a lo largo de los últimos años. En este tiempo ha existido un fuerte avance, similar al que se ha vivido en otros muchos países del mundo, donde en la actualidad se atienden más de 300 millones de personas con esta terapia.

¿Con qué recursos contamos actualmente en el Archipiélago? ¿Cuál es su verdadero alcance? Encontramos varios centenares de médicos y de farmacéuticos que la emplean con asiduidad y otros, ocasionalmente. Varias decenas de veterinarios que trabajan con ella como un recurso terapéutico más e incluso en algunos usos agrícolas. En los últimos años, se ha establecido a través de varios estudios, que unos 200.000 canarios la han utilizado.

Además de los médicos, farmacéuticos y veterinarios que habitualmente trabajan con ella, con su titulación propia y una acreditación y formación específicas, también existen muchos sanitarios de diferentes ramas que la recomiendan, tales como fisioterapeutas, psicólogos, diplomados en enfermería, matronas, auxiliares clínicos y de farmacia, e incluso médicos que no siendo homeópatas la aconsejan eventualmente y para algunas indicaciones específicas.

En cuanto a la legislación española, se encuentra hoy en día a medio camino de lo que sería necesario, con avances importantes con los medicamentos, que se venden oficialmente en todas las farmacias, y con las consultas médicas, que son legales. Nuevas medidas serían necesarias para seguir avanzando en una homologación con los países europeos, pues Europa sigue siendo un referente de calidad y de desarrollo legislativo y social muy importante.

La Asociación Canaria de Usuarios y Amigos de la Homeopatía se legalizó en el año 2012 con pacientes, familiares, y personas que defienden el derecho de todos los ciudadanos a ser tratados con esta rama de la Medicina, ahora o en el futuro, sin cortapisas ni trabas. Nos encontramos al principio de la tarea que nos hemos propuesto, queremos que cualquier ciudadano canario pueda tener la posibilidad de elegir o no homeopatía, y para ello se necesita una información veraz sobre las posibilidades y límites de este método terapéutico y que este conocimiento pueda llegar a todos. Además de ser necesaria una apertura a las nuevas realidades.

Dado que consideramos a la homeopatía como una práctica social, al ser muchas las personas que la utilizan, pensamos que debería ser protegida por las instituciones públicas, en todos los niveles que ya se encuentra incorporada en la Comunidad Europea. Si se trata de una práctica sanitaria más, que lo es, como tal debería ser tratada, sin discriminaciones y para mayor beneficio de los pacientes.

Desde hace unos años venimos sufriendo una campaña de descrédito en relación a la homeopatía los pacientes, los profesionales sanitarios y los productores-fabricantes. Comprobamos que se trata de algo organizado desde el momento en que los argumentos de los detractores son siempre los mismos y sin ninguna originalidad, una repetición de tópicos sin sentido, desde cualquier foro. Estas campañas de acoso esperamos que algún día se paren y se sustituya la difamación por el respeto, el diálogo y la tolerancia, que es lo propio de los países más avanzados del mundo, donde queremos encontrarnos y donde queremos hallar también a las generaciones venideras.

*Enfermera y presidenta de la Asociación Canaria de Usuarios y Amigos de la Homeopatía