En las oquedades de la Asomada alta, junto a la rodadera colorada del Jorado, existe una amplia cueva, la de los Guanches, una necrópolis que se supone fue enterramiento de los antiguos pobladores de la Isla, los bimbaches; pero si los letreros de la Candia y de la Caleta están casi en su mismo entorno geográfico de apenas dos kilómetros, bien pudieran ser de navegantes fallecidos y enterrados en ella. Todo es posible.

Recuerdo observar restos funerarios, incluidos diferentes huesos diseminados por su superficie, tras acceder a la cueva que, en tiempos de agilidad infantil, aunque peligroso no era fácil y, además, se consideraba como un punto de referencia de cierta aventura mas allá de los linderos del Tamaduste.

Ignoro en las condiciones que estará la cueva de los Guanches, pero si se sabe que ha sido expoliada, pero aún así es de desear que al menos se despierte la intención de protegerla por ver si queda algún vestigio de la historia de la isla en ella reflejada.

Si solo están sus paredes angostas y vacías de simbolismo, de la misma manera que se ha intentado y logrado reconstruir otros lugares semejantes, llamase "cueva de la Pólvora", seria necesario que a la cueva de los Guanches se le diera el tratamiento patrimonial-histórico que merece a pesar de las grandes dificultades que entraña su acceso.

Existen lugares en la Isla que se han ido incorporando a su acervo cultural y se han allanado los caminos que hasta ellos conducen. Como la cueva de los Guanches posee motivaciones históricas que habría que estudiar y "desenterrar" y, sobre todo, comprender el porque de la existencia de esa necrópolis alejada de la vieja capital de la Isla, Amoco, donde no habían pobladores, e ir hacia un lugar escarpado y dificultoso que sirviera de enterramiento.

Seria interesante leer esos grabados libico-bereber, los restos que quedan de ellos, en la Candia y la Caleta, para tener acceso a paginas de la historia de la Isla que aún están por descifrar, de ahí que el esfuerzo que debe hacerse por ir rescatando todo aquello que contiene escondidos mensajes de la vieja historia para que pudieran incorporarse a la cultura de las Islas en general.

La cueva de los Guanches del Tamaduste, como otras joyas patrimoniales, permanece en el olvido, se recuerda cuando a ella subimos con curiosidad de ver lo que se podía encontrar, pero los saqueos, las apropiaciones y, sobre todo, el descuido han propiciado que solo quede de ella esa visión lejana que tenemos desde los cantiles o desde el roque de las Campanas, pero seria mas interesante que esta visión se acercara y se le pudiera dar la importancia que tiene.