1.- La presencia de Churchill en Cámara de Lobos (Madeira), donde sacó sus pinceles y pintó, está inmortalizada por una estatua, creo recordar. Por aquí pasó Churchill y nadie recuerda la estancia en Tenerife, fundamentalmente en el Puerto de la Cruz, del gran estadista británico, acompañado por Aristóteles Onassis. Lo mismo ocurrió con The Beatles. Ringo, Paul y George -John Lennon no vino- estuvieron en Tenerife y se alojaron durante unos cuantos días en la citada ciudad norteña. Se pusieron rojos como cangrejos y David Gilbert, propietario, con José Manuel Sotomayor, del Lido San Telmo, no los dejó tocar en su establecimiento "por peludos". David, judío, había sido un destacado piloto de combate de la RAF durante la Segunda Guerra Mundial. Pero, evidentemente, no sabía nada de música. Mejor suerte ha tenido Agatha Christie, que tiene una calle en el Puerto de la Cruz y un busto en el Sitio Litre, donde se alojó o al menos visitó, original de Marta Von Porozslay.

2.- El Puerto de la Cruz tenía que poner nombres de calles en honor de todos los visitantes famosos que han estado en la ciudad. Desde reyes a jefes de Estado y de Gobierno. Como el canciller Von Papen, el premier británico Anthony Eden, el también canciller Konrad Adenauer, el canciller Schröeder, los reyes de Suecia y Dinamarca. Todas estas personalidades han visitado, en distintas etapas, el Puerto. No olvido al famoso astrónomo de la reina Victoria, Piazzi-Smith, ni al padre de Oscar Wilde, que era médico y que ayudó a combatir epidemias de cólera a los médicos tinerfeños y británicos que ejercían en el Puerto de la Cruz.

3.- Quien ha escrito de estas cosas es mi buen amigo Lemus, que ha logrado recopilar mucha información sobre visitantes ilustres y la ha plasmado en varios libros de éxito. Además, como los Lemus son libreros, pues los comercializan muy bien. Pero, como buen pueblo sin memoria y sin ideas, el Puerto de la Cruz, y Tenerife, que tiene más medios, a través del Cabildo, no han sido capaces de hacer justicia con estos personajes. ¿Por qué no una estatua con los tres beatles en la avenida de Colón? ¿Por qué no calles con los nombres de visitantes ilustres? ¿Por qué no una estatua de Sir Winston Churchill saliendo del Lido San Telmo, tomando como referencia la famosa foto de Imeldo Baeza? Es cuestión de imaginación, nada más. Todo esto le daría caché al Puerto de la Cruz. Y no cuesta tanto. Incluso hay artistas que lo harían por el costo.

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