1.- Confieso que me entró tremendo soponcio cuando vi y oí a la vieja Bardem lanzar una diatriba contra Soria, Brufau y Repsol, rodeada de comunistas. Ahora resulta que son los comunistas los exegetas de Canarias. Porque hasta Llamazares estaba allí, y todo el rojerío madrileño, hablando de estas ínsulas, de las que no tienen ni puta idea. Miren, yo respeto a los que no quieren que se extraiga petróleo. Respeto las teorías de la contaminación, aunque no necesariamente las comparta. Pero ver a la comunista de cinco estrellas, a la veterana Bardem, que es más antipática que su hijo el de "No es país para viejos", leyendo un manifiesto en contra de las prospecciones, me repatea el estómago. Es que allí no había sino comunistas y algún despistado del PSOE. Se trataba de un acto en Madrid para llevar, primero a España y luego a Europa, la fobia petrolera. Cree la izquierda que la ecología es una exclusiva suya, cuando yo, de derechas de toda la vida, soy más ecologista que nadie.
2.- ¿Quién mandó llamar a la vieja? No tengo ni idea, pero craso error. Porque todo lo que toca -incluido su restaurante "La Bardemcilla", en Chueca- lo chafa. En el restaurante tuvo un ERE, comunista también, que dio mucho que hablar. Estos progres son la leche. Y cómo vive el niño Bardemcito en los Estados Unidos. Casi nadie al aparato. Así soy comunista yo. Con tal de ganar la cuarta parte que él me dejaría peinar como el asesino de "No es país para viejos", que es el peor peinado que se ha visto en el cine desde los rizos de Mirna Loy.
3.- Y si no hay petróleo, ¿de dónde coño van a sacar la gasolina que le ponen al haiga de la vieja comunista millonaria cuando vaya a visitar a su familia a Hollywood? No la veo yo en bicicleta por Sunset Boulevard. En Sevilla dieron su nombre a una calle y se la quitaron después, porque resulta que no había hecho nada por Sevilla, sino joder. A lo mejor San Ginés le pone una plaza en Lanzarote y una estatua para que le caguen las palomas. Yo el acto de Madrid no lo hubiera celebrado, al menos con ese público. Desde que el rojerío haga suya la lucha petrolera, se acabó. Porque la izquierdona española está gafada, no da una. Si el petróleo es una batalla de CC, sea, pero no busquen refuerzos en la vieja Bardem y su banda porque lo lamentarán. Lo juro por mi santa madre.
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