Una raya en el agua. En eso se quedará la investigación de la juez de Instrucción Seis de Sevilla. Con toda convicción me lo afirmó uno de los nuestros, un político canario, recordándome los casos que instruyó el ex juez Garzon, que se quedaron en nada.

Yo, que sigo creyendo en el Estado de Derecho, me niego a pensar que la instrucción se quede en nada y no tenga consecuencias lo ocurrido con el dinero público. Esta vez en Andalucía. El procedimiento que se inició por el asunto de los eres nos ha puesto nuevamente en la realidad política actual y su alto grado de corrupción. Con la suerte que la juez contó; primero con su arrojo y valentía, además con la colaboración de la Guardia Civil y algún que otro arrepentido. Así inicio la instrucción y destapó el cubo.

Por derecho natural, todo lo que esta estancado tiende a oler mal y en Andalucía llevan 33 años los mismos. A todas luces los indicios apuntaban que no era normal, y mucho menos entraba dentro de los parámetros de la lógica, lo que estaba pasando y pasa en la casta política, sea del partido que sea. En nuestro proceso penal el soporte de legitimación de la prueba indiciaria lo encontramos en la jurisprudencia, que, a fuerza de resoluciones para casos concretos, nos da las líneas maestras sobre la prueba indiciaria dada la escasísima normativa que nuestros textos positivos le dedican.

Para que se inicie una investigación a un administrador de lo público, además de los indicios, es necesaria un alto grado de colaboración con los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, en estos casos Guardia Civil o Policía Nacional. Pero lo principal es que se cuente con un juez instructor que valide las pruebas y haga lo que tiene que hacer, que no es ni más ni menos que lo que esperamos de ellos. instruir, investigar, juzgar y que se cumpla lo juzgado. Así que denuncia, pruebas y un juez que instruya.

En lo que se refiere al político ex presidente de Andalucía, hoy ya esta blindado, ya es senador. Así que ya no se tiene que preocupar. En el Senado contará con bastantes compañeros que le asesoraran de cómo tiene que declarar cuando un juez le pregunte. Él se preocupó de airear a los medios que no sabe cómo hacerlo.

La relación de actividades delictivas cometidas prevaliéndose de un cargo público, englobadas bajo la "corrupción política" en sus diversas vertientes están, entre otros, los delitos urbanísticos, contra la administración pública, cohecho, malversación de caudales y prevaricación. Incrementos no justificados de patrimonio –este de fácil apreciación por los contribuyentes del reino–, adquisición de bienes sin estar justificado el efectivo con el que se adquirieron, ingresos en efectivo en depósitos bancarios y desvío de fondos a cuentas en el extranjero. Operaciones de conversión y ocultación de las fuentes o propiedad de los bienes o dinero, usando testaferros y sociedades pantallas para vestir o dar apariencias de legítimas las ganancias. Todas esta cuestiones se han tenido en cuenta para enjuiciar hechos tan relevantes como los ocurridos en Marbella y han sido usado como base formal para investigar otros.

Aunque, culmino y no quiero dejar de hacerlo sin escribir hoy sobre el proceso soberanista en Cataluña. Es impresionante. Mientras mira para otro lado el presidente del reino. En Cataluña la sociedad nos ha demostrado que es ella la que lleva la bandera de la independencia del reino. Los que iniciaron esta marcha les va costar mucho cortarla. No es necesario más elementos para buscar una solución democrática que dé salida a este movimiento. Está muy claro que los que se manifestaron se quieren ir del Estado. Un Estado federal de hecho, aunque el derecho nos diga otra cosa.

*Abogado director Bufete Inurria.

@inurriaabogado