Al parecer, el pueblo de Canarias ha agotado su capacidad de resistencia, y habrá en las Islas una huelga general contra el presidente del Gobierno, Paulino Rivero, y todo el Ejecutivo que le rodea y le ampara en la peor de las gestiones conocida en toda la historia de este desafortunadísimo Archipiélago, que una vez fue afortunado.

Lo de la huelga general de los que aquí residimos y sufrimos un mal gobierno se había pensado desde tiempo atrás ante el paro galopante declarado desde hace tiempo y la desastrosa gestión para tratar de contener el desmadre por parte del Ejecutivo, que, en todos los casos, llegaba siempre a lo contrario.

Los sindicatos, que se empeñaron en sostener la huelga, ante el temor de un bajo seguimiento por parte de los trabajadores, retrasaron la fecha de la protesta unos meses.

La huelga anunciada ha sido aplazada a después del verano y se espera a comprobar cómo son las cuentas autonómicas para el año 2014, algo que se verá en octubre, porque piensan los sindicatros que los presupuestos les darán más razones para la protesta.

O sea que hasta esa fecha no habrá movilizaciones, según se sabe, contra el Gobierno de Paulino Rivero. Se trata de que estas Islas encuentren el verdadero sentido de su futuro, lo que se está procurando hacer de la mejor forma para todos.