De la misma manera que el pasado siglo XX y los anteriores se caracterizaron por grandes y devastadores conflictos bélicos entre naciones colindantes o del mismo continente, con la creación de la ONU tales agresiones, además de irracionales, son ilógicas e ilegales, haciendo que el factor determinante sea que las naciones más chicas fueran tomadas y absorbidas por la fuerza por las más poderosas, con el objeto de formar potencias con capacidad bélica de autodefensa y poder ofensivo para atacar o invadir a otras rivales. Hecho que repercutió negativamente en el desarrollo económico, social y cultural de las naciones anexionadas o conquistadas bajo la hegemonía y control de otro Estado más fuerte, generando enormes deudas presupuestarias, frecuentemente causando pobreza, atraso industrial y gran desigualdad económica entre sus clases sociales.

El mismo Mercado Común Europeo, ahora UE, "chantajeantemente" exclusivo sobre el resto de los países que no pertenecen a tal gremio, nació con el Tratado de Roma de 1957, entre países que salieron de sangrientos y mortíferos enfrentamientos bélicos que dieron lugar a dos catastróficas guerras mundiales, para así, con tal acuerdo, evitar más conflictos. Lo que evidencia que en el plano económico va contra natura, acumulando continuamente deudas trillonarias que desestabilizan el sistema financiero global, ocasionando ruina y desastre en la economía de Europa y por extensión al resto del mundo. La grandeza de Europa estuvo siempre en su diversidad y no en la contraproductiva y castrante homogeneidad que tal organización dicta y compulsiona.

Superado tal elemento de terror y miedo de que un Estado invada y sojuzgue a otro por muy chico que este sea (el último fue por Irak a Kuwait en 1990, al que Irak pretenciosamente titulaba su provincia nº 27, por lo que el pobre Sadam Hussein terminó asesinado en la horca), los grandes Estados depredadores de los chicos con economías artificiales, y consecuentemente ruinosas, en esta era se vuelven obsoletos, por mucho que algunos se empecinen en ir contra la corriente de la razón libertaria para mantener su "inquebrantable" unidad nacional, eso sí, bajo la indiscutible e incuestionable hegemonía sobre los cautivos que domina. Como es el descarado caso del anacrónico, mezquino y destructor colonialismo que en Canarias nos oprime y tiraniza.

La era libertaria de emancipación y recuperación de la soberanía de las naciones cautivas está bien en marcha en los cinco continentes. En la misma Europa, desde Odessa (sur de Georgia) hasta el otro extremo noroeste, Escocia, del Reino Unido, abriendo paso a un nuevo orden mundial, para bien, tanto en lo político como en lo económico.

Es por eso que esa despreciable caterva de oportunistas de la política del momento, que para nuestra desgracia nos gobierna en Canarias, serviles y rastreros lacayos del colonialismo (por lo general mediocres fracasados en sus respectivas profesiones u ocupaciones), corruptos hasta el mismo tuétano, que miserablemente nos venden y con desvergüenza y desfachatez nos instan al abandono y deserción de nuestra patria archipielágica por el desahucio de la emigración, debe saber que su impunidad y tiempo lo tienen bien contado.

Jaime Morera Felipe

(Santa Cruz de La Palma)

Listas de espera

Me acaban de dar cita, la primera, para noviembre de 2013 para el neurólogo. La cita fue solicitada por el médico de cabecera en previsión de alhzéimer. Con lo importante que es diagnosticar esta enfermedad, un año puede ser irreparable.

Díganle a Paulino lo que ha mejorado la reducción de las listas de espera. En el resto del país la media de estos casos está en 40 días. Aquí, en la república bananera de Paulino, en 365.

Guillermo Cruz Ruiz