1.- Ha dicho Hermoso que a él le gustaría "para poder mirarle a la cara a sus amigos" que el próximo presidente del Gobierno de Canarias (de CC, naturalmente) fuera de Las Palmas. Bueno, no dijo de Las Palmas, sino de aquella isla de enfrente. Que se lo digan al PP: Soria lleva tropecientos años como presidente y nadie se rasga las vestiduras. Ni lo discuten. El equilibrio político regional no necesariamente debe estar en la procedencia, que también. Pero me parece que Hermoso, criado y ensolerado en Tenerife, ha tenido un lapsus geográfico. Porque CC en Las Palmas no es nada. Pero nada de nada. Allí todos sus militantes están enchufados en el partido. O casi todos. No hay "corpus" electoral en la isla de enfrente, por usar un latinazgo de los que tanto le gustan a mi amigo LorenzoOlarte. Por los confidenciales corre el rumor de que la próxima candidata a la presidencia del Gobierno (por CC) será AnaOramas, cautivo y desarmado (como el ejército rojo) PaulinoRivero. Pero, claro, estamos hablando del año 2015 y esto queda muy lejos. Es mejor hablar del presente; que Rivero se vaya cuanto antes a su nueva casa "moruna" de El Sauzal.

2.- Ha dicho FernandoClavijo que en el congreso le rechazaron una lista de consenso y esta sí que es una novedad. ¿Quién la rechazó, Paulino Rivero, Barragán? A Rivero le crecen los enanos. Le ha fallado hasta su proyecto del Tete, en el que embarcó a su amigo MiguelConcepción. Con veinte millones de deuda, ¿quién levanta a un club de Segunda B? A Miguel Concepción le crecen los enanos: en su propio canal de televisión arremeten contra él sin piedad. Qué barbaridad. Una vez -eso es que no me conocía- mi estimado EugenioIbáñez me puso de espía a un chico de ese canal, JoséAvero, por si yo me desmadraba en el último programa de mi contrato. Repito: lo que es no conocerme. No suelo rebelarme contra el que me paga; hubiera sido un ingrato y un traidor.

3.- Hay una revolución -y no de claveles- en la Coalición. Claro, Paulino tiene casi el 45% del partido en contra y así es difícil gobernar, porque la oposición es muy fuerte; mucho más fuerte que nunca. A ese partido hay que refundarlo, o algo así, como dice Ana Oramas. Yo, la verdad, no entiendo mucho de refundaciones, ni de refundiciones, pero sí que noto algo raro en CC. Como si se les hubiera ido la cosa de las manos, como si se hubiera metido el enemigo en casa, como si ya todo fuera distinto. Será porque he seguido este partido desde su fundación y no lo concebía como una guerra, sino como un centro nacionalista capaz de llevar a Canarias donde tiene que estar. Pero ya veo que no. Se lo han cargado.

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