Concepción en La Laguna. La verdad es que, en principio, ni me pareció bien ni mal. Se hacía por una iniciativa privada y parecía que en una sociedad con libertad de culto a nadie ofendía. Y hasta ahí podría pasar de forma inadvertida si no fuese porque un grupo político insignificante, antisistema, de ideología socialista extrema, anticlericales, totalitarios y excluyentes se opusieran a ella. Todo ello cuando los musulmanes de Sarajevo se han propuesto hacer un monumento a Juan Pablo II, aunque no lo reconozcan como santo, porque fue la única persona que cada mañana de domingo les lanzaba mensajes de esperanza a la vez que solicitaba que se acabara la guerra de la antigua Yugoslavia (1992-1995). Y como ellos millones de creyentes y no creyentes agradecidos en todo el mundo. Toda una revelación y un ejemplo para estos progres de pacotilla, que de la forma más ridícula e ignorante consideran que "no tiene ningún vínculo directo con Canarias". Desde luego que para ellos no.

Alegan estos anticlericales que Juan Pablo II "representa los valores y creencias de un determinado sector de la ciudad lagunera". ¿Cómo que de un sector? Mal que le pese, de la mayoría de los laguneros. En el colmo de la estupidez, de la forma más cruel e intentando justificar su propuesta, no dudan en ultrajar la memoria de Juan Pablo II, el considerado como líder más influyente del siglo XX. Para que vean ustedes hasta dónde llega el analfabetismo funcional. Denuncian que "Juan Pablo II protagonizó, en muchos aspectos, un claro retroceso, al perseguir a las corrientes más aperturistas y críticas de la Iglesia". Es decir, que estos individuos se nos presentan como unos defensores de la renovación de la Iglesia católica ¡Qué desvergüenza!

Denuncian también "su papel activo en el encubrimiento de miles de casos de abusos sexuales contra menores cometidos por miembros del clero". Basta ir a las hemerotecas para comprobar que Juan Pablo no ocultó su desacuerdo, y, sin ir más lejos, en el año 2002 dijo que "no hay lugar en el sacerdocio ni en la vida religiosa para quien haga daño a los jóvenes".

No debemos olvidar que estos denunciantes profesan unas ideas de extrema izquierda como las que llevaron en la guerra civil a la destrucción del patrimonio artístico religioso y documental considerado como símbolos de la religiosidad. ¡Como para fiarse!

En fin, la verdad es que este tipo de políticos no se merecen ni media palabra. Con idioteces como estas intentan ganar en la calle lo que no pudieron en las urnas. Afortunadamente, es bueno que, de vez en cuando, manifiesten sus verdaderas ideas e intenciones ocultas para que la sociedad, y algunos de los suyos que valen, los vayan conociendo de una vez, porque poco a poco van mostrando el rejo de lo que realmente son. Y es su propia presencia lo que "violenta la diversidad de creencias" y no la estatua del Papa.

Excelente lección del Obispado de La Laguna, que sin entrar en polémicas buscó una rápida solución para instalar la estatua en la plaza del Dr. Olivera, que se inaugurará el 15 de abril a las 12.00 h, y el que quiera ir y verla tiene libertad para rendirle homenaje, porque con Juan Pablo II, y los laguneros, no se puede.

Sarter

Trabajar sin cobrar

Estimado director, ¿por qué no se le informa a usted de lo que están haciendo algunos empresarios en Tenerife, llamando a gente a trabajar sin cobrar sueldo? A prueba. Si vales, entonces te contrato. Pero también, al llegar determinado momento, te despido sin un duro y no te contrato. Pero qué listos son los empresarios de Tenerife. Mire a ver cuándo van a tomar ejemplo de los de Las Palmas. Esos sí saben hacer negocios y llevarse todo para su isla. Los de aquí solo hablan de coches, motos, aparatos electrónicos y divertirse. Lo mismo que los venezolanos. Puro calco. Se lo digo porque he estado en Venezuela muchas veces. Figúrese usted si esto fuera un Estado independiente. ¿Cómo se imagina que estaríamos todos? Piénselo bien y critique más las cosas que verdaderamente necesitamos todos, no algunos. La independencia es negocio para algunos, no para el pueblo.

Un cordial saludo y siga atacando a Paulino Rivero para ver si nos lo quitamos de encima.

Buenaventura Padrón García