CONTINÚA la actividad política en el mes de febrero y parece ser que los astros no han tenido presente las acciones de sus fieles seguidores del Partido Socialista. No sabemos los motivos por los que las conjunciones celestiales (auspiciadas por la ministra Leire Pajín) han actuado así, pero lo cierto es que a José Luis Rodríguez Zapatero y a todo su séquito los han dejado fuera de toda actividad interplanetaria.

De acontecimiento planetario hemos pasado a plantones acontecidos. Lo confirman las recientes declaraciones de un portavoz oficial de la Casa Blanca, en donde ha dejado claro que el presidente norteamericano no acudirá a la cumbre Europa-USA. Es más, constata que nunca ha estado dentro de los planes de Barack Obama.

Todos recordamos cómo Zapatero se ha vanagloriado en numerosas ocasiones de la importancia que tendría para España la presencia del presidente demócrata, una ocasión que afianzaría las relaciones entre ambos lados del Atlántico. Sin lugar a dudas, la presidencia semestral compartida (según el Tratado de Lisboa) de la Unión Europea impulsaría la situación actual de nuestro país.

Más cercanas nos quedan las palabras del ministro Miguel Ángel Moratinos cuando el pasado 27 de enero mantenía la presencia estadounidense.

Aparte de la mentira, de nuevo el ridículo y el más absoluto fracaso hacen estragos dentro del gobierno español. Nos han engañado durante meses al intentar fortalecer su mandato con dicho encuentro. Lo peor de todo es que, a día de hoy, no han sido capaces de reconocer su fracaso y han preferido desviar el tema aludiendo a cuestiones de agenda.

Peor nos lo ponen porque hubiese sido preferible declarar que, en realidad, dicho encuentro fue propiciado solamente por sus ya acostumbradas sandeces y ahí quedaba todo. No sería la primera vez que faltan a la verdad. Solemnidad de la nada.

Que Obama no dé importancia al presidente de turno europeo eso sí es para preocuparse. También lo es que se haya tenido que modificar el calendario programado por la presidencia española de la UE. Ahora no sólo no viene el principal mandatario de EEUU, sino que ni siquiera sabemos si habrá cumbre o no. En principio está cancelada.

Allá donde va, Rodríguez Zapatero deja la huella de su política carente de sentido común. No lo quieren reconocer, pero es más que evidente el fracaso de la recién estrenada presidencia europea del portavoz socialista.

De los últimos en confirmarlo ha sido el editor de la revista Temas, José Félix Tezanos, cuyo Consejo de Redacción está presidido por Alfonso Guerra. Nos hablan sobre un gobierno de concentración con el PP que dé credibilidad.

Los datos del reciente eurobarómetro hablan por sí solos. La confianza que tienen depositados los europeos en el Gobierno español ha bajado 19 puntos durante el último año, situándolo en el 29%. No hay que olvidar que España corre el peligro de presentar los mismos riesgos estructurales que tienen Grecia o Portugal.

En muchas ocasiones la mentira suele provocar destrucción ante quien la origina, y algo parecido es lo que le está ocurriendo al gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Su imagen se va desintegrando a una merecida velocidad aterradora. A los españoles se les suman ahora el resto de representantes que participan de la Unión Europea, por no hablar del propio Obama o de su círculo más cercano.

Como no queremos ser pesimistas, queremos dejar tranquilos a los que aún confían en las palabras del presidente de España porque probablemente afirmarán en breve sobre los verdaderos motivos por los que no han dado importancia al citado encuentro.

De hecho, ya se han anticipado y nos han asegurado que Zapatero participará como invitado principal en el Desayuno Nacional de la Oración, acto que abre cada año en Washington el curso político y en el cual podría producirse dicha reunión.

Igual tiene suerte y consigue la foto deseada para vanagloriarse de sus excelentes relaciones internacionales, fruto (según él, claro está) de su esfuerzo por situar a España entre las principales potencias mundiales.

Por cierto, no entendemos cómo ha aceptado la invitación de la Oración cuando se considera ateo. Aún esperamos la visita que tiene pendiente con Rouco Varela. España iba hacia el corazón del mundo y ahora está más lejos que nunca.

Zapatero, váyase, es usted el presidente electo, pero no está capacitado para ello.

y consejero del área de Sanidad y Relaciones con la Universidad

alarco@tenerife.es