EN ESTOS días acaba de salir de imprenta la quinta edición del libro "Vida y camino de san Juan de Dios 1495-1550", original del padre Fernando Lorente, O.H., actualmente, y desde 1984, capellán del hospital San Juan de Dios, de Tenerife, así como asiduo colaborador de este periódico. Por primera vez, ese libro, como suplemento extraordinario de la serie "Familia Hospitalaria", en número de 2.000 ejemplares, vio la luz en 1990, en que se cumplía el III Centenario de la canonización del fundador de la Orden Hospitalaria, canonización que tuvo lugar el 16 de octubre de 1690.

La segunda edición salió de la imprenta en 1994, en número de 4.000 ejemplares; la tercera, en el año jubilar 1996-97, IV Centenario de la presencia de la Orden Hospitalaria en Hispanoamérica (1596-1996) y la tirada fue de 4.000 ejemplares, y la cuarta edición en 2001, con el mismo número de ejemplares que la anterior. La edición quinta, la que acaba de salir en el año 2009, tuvo una tirada de sólo mil ejemplares.

Con la presentación del autor, abre esta edición del libro un artículo del que fue obispo de la Diócesis Nivariense monseñor Damián Iguacen Borau, titulado "La santidad es siempre moderna y actual", y empieza ya con un cuidadoso, detallado y muy interesante y bien escrito relato biográfico referente al santo fundador, desde su nacimiento, el 8 de marzo de 1495, y su infancia en el pueblo portugués de Montemor o Novo, en la provincia lusitana de Évora, cuando reinaba en ese país Juan II y en España, los Reyes Católicos.

Desde su juventud, Juan Ciudad Duarte, que esos eran su nombre y apellidos, vio claro su camino en la vida. Empieza a sentir la vocación que lo llevará a crear la gran obra de su vida y se entrega a ella en cuerpo y alma. Juan Ciudad demuestra, desde pequeño, su espíritu aventurero, que lo lleva a no conocer obstáculos o a vencerlos cuando se le presentan. A los ocho años de edad se encuentra en la ciudad toledana de Oropesa, situada a unos 300 kilómetros de su pueblo natal portugués de Montemor. Ya vive su aventura, a esta edad temprana, lejos de su familia.

En el capítulo siguiente del libro, el P. Fernando se refiere a la madurez humana y espiritual y al poder de decisión del muchacho y así, a toda su vida, a lo largo de las 95 páginas del libro, ilustrado con magníficas fotografías y en el que se ha introducido el juicio expresado por muy destacadas figuras de la Iglesia, la medicina, la literatura, la prensa y la sociedad sobre san Juan de Dios y su obra.

En resumen, un magnífico trabajo sobre esta persona excepcional a la que tanto le debe el mundo entero, pues hasta el remoto norte helado de Siberia llega San Juan de Dios con sus casas, con sus hermanos y con su dedicación a atender a todos los pobres.