HILARIO RODRÍGUEZ, concejal del Ayuntamiento de Santa Cruz por CC, ha demostrado sobradamente que es un gran patriota. Y si en algún momento ha declarado que es independentista, eso lo hace más patriota aún. Lo que no se puede es ser patriota "nacionalista", patriota del PP o patriota del PSOE. Los dos últimos son partidos españolistas que quieren perpetuar la situación colonial de Canarias. Para ser patriota hay que ser nacionalista sin comillas. Ser nacionalista en estas condiciones implica ser decente, consecuente y amante de la nación canaria. Amante de la identidad, la dignidad y la libertad del pueblo canario. Tres conceptos que engrandecen a hombres y mujeres. Tres conceptos que no están engrandeciendo a la flamante nacionalista de CC en Madrid, que es españolista y socialista antes que canaria; una persona que engaña a su electorado, pues fue elegida en Tenerife para defender los intereses de su isla y de Canarias y se ha entregado al PSOE y a Las Palmas. Esos tres conceptos citados no engrandecen, como decimos, a la señora Oramas. Al contrario: la han estigmatizado para toda la vida a ella y a su entorno por traicionar a la nación canaria, a sus antepasados y a los que, viviendo en este Archipiélago, no queremos ser esclavos ni de hecho ni de derecho. No queremos depender administrativamente de los peninsulares, ni humillarnos ante los nacidos en Madrid o en cualquier otra parte del Estado español.

Señora Oramas, menos mal que usted, a diferencia de un periodista godo y ágrafo que dirige un caballo de Troya de la prensa canariona infiltrado en Tenerife, no confunde los términos secesionismo, separatismo e independentismo. No obstante, usted y su compañero en el Parlamento nacional siguen calificando de absurdas las ansias independentistas de estas Islas. ¿Es absurdo aspirar a ser personas libres, dignas y no sujetas por la fuerza a ningún otro ser humano? ¿Es eso un disparate o lo es, por el contrario, su actitud políticamente traidora a quienes la eligieron? En definitiva, ¿no será usted misma un disparate, señora Oramas? ¿No es un disparate, insistimos, haber sido elegida para defender a Canarias, y estar en Madrid arropando los intereses de los socialistas y peninsulares, en detrimento de Canarias?

Volviendo a don Hilario, ¿piensa la señora Oramas que no estamos ante un hombre juicioso? Hilario Rodríguez es una persona temperamental pero patriota de su patria grande, que es Canarias, y de su patria chica que es Santa Cruz. Mejor que usted lo ha defendido el señor Barragán, pese a que este último no cuenta con nuestros afectos como político.

Señora Oramas, con su actuación en el Congreso de los Diputados ha perjudicado y sigue perjudicando a su partido y a los votantes de su partido. Con su forma de proceder va a conseguir, como ha venido ocurriendo, que CC saque un solo diputado en Madrid o ninguno en las próximas elecciones, porque a estas alturas nadie se fía de usted y de don José Luis. Sin embargo, usted y su partido se pueden recuperar si tienen la valentía y la honradez de pedir, de forma clara y determinante, que se nos conceda la independencia. Y si no quiere usted asustar -o si le repugna la libertad-, pida al menos la autonomía total hasta que tengamos independencia, que es casi lo mismo. Autonomía plena en temas de Hacienda, puertos, aeropuertos, tasas, etcétera. Al mismo tiempo, pregunte qué piensa hacer España con un Archipiélago que no es suyo, sino de los canarios, ante las pretensiones de Marruecos. No olvide que en nuestra situación actual, es decir, mientras permanezcamos como una colonia de España, somos íntegramente islas marroquíes porque estamos en sus aguas.

Por último, le aconsejamos que no tenga usted miedo de ir en contra de su nuevo partido, el PSOE. Si quiere seguir como diputada, vaya añadiendo a su actuación unas gotas de esencia de soberanía y de libertad, y dejen de seguir molestando a EL DÍA, tanto usted como don José Luis, con términos como absurdo y disparate para calificar la inevitable e imparable corriente independentista actual. Sea consecuente con usted misma y con los canarios. Nada la obliga a hacerse la simpática ante los españoles y los socialistas. Sea valiente y diga que no es española sino canaria, porque ni usted misma cree que es española. Quien único está luchando por la causa nacionalista y por Canarias es Paulino Rivero. Coja recortes del él, señora Oramas.