Estimado señor director:
Le escribo en nombre de la Agrupación Socialista de Tegueste para contestar a una carta escrita por Romen y publicada en este diario el pasado martes 14 de julio en la sección de cartas al editor.
En primer lugar, debemos decir que el compañero Celestino Hernández se va por motivos profesionales. No se va en un momento en el que los socialistas teguesteros estemos haciendo aguas. Muy al contrario, estamos a mitad de una legislatura en la que nuestro grupo municipal, con nuestro portavoz Antonio Expósito al frente, lidera la iniciativa política llevando mociones y preguntas a los plenos en beneficio de todos los teguesteros.
Nosotros creemos que se puede opinar lo que se quiera si se hace con la verdad y sin faltarle a nadie. Las opiniones de Romen sobre Celestino o Antonio no nos merecen ningún respeto, ya sean positivas o negativas. La razón principal es que escudarse en el anonimato para desacreditar no nos parece correcto ni democrático. Que dé la cara y haga sus críticas a pecho descubierto como lo hacemos nosotros. Menos serio nos parece aún el análisis que de las elecciones europeas hace el tal Romen. ¿Cómo se atreve a comparar elecciones generales y locales con las europeas? Aún así, el PSOE de Tegueste cosechó el mejor resultado porcentual en toda la isla de Tenerife. Seguimos poseyendo la base amplia de votantes teguesteros que confía en nuestro proyecto y no nos han llegado votos de tirios y troyanos que luego desaparecen, como le pasó al PP.
De Tegueste no desaparece el diálogo porque uno de nuestros concejales deje su acta. Otro, que pertenece al mismo proyecto liderado por nuestro portavoz, cogerá el acta y continuará trabajando con denuedo como lo he hecho y seguirá haciendo Antonio, Lola, Elena, Marta, Santiago y Juan. Nada más lejos del bufonismo, la crispación, la intolerancia e intransigencia de las que habla el tal Romen. Trabajo, seriedad, contundencia en la defensa del interés general de los teguesteros. Sólo eso y nada más.
Plácido Bazo Martínez
(Secretario de Comunicación. Agrupación Socialista
de Tegueste)
Carrera de cintas
El "Superconfidencial" de este domingo 19 de julio (el sábado fue nada menos que 18 de julio y pasó sin que nadie le dedicase ni un nostálgico recuerdo fascista, como se dice ahora) nos trae la descripción, certera y amena, como todo lo suyo, que nos hace Andrés Chaves de las fiestas de su pueblo. Y nos habla de algo que casi había olvidado y que no sé si continúa, porque del relato no lo deduzco con certeza, aunque uno no se figura ahora caballos corriendo por la calle, la verdad. Lo primero que me sorprendió fue lo de "sortija", que había también olvidado en esa acepción, tanto que me he ido al DRAE y allí viene, además de las cinco acepciones de la palabra, lo de "correr sortija", donde, como no podía ser menos, describe exacta y fielmente en qué consistía ese correr la sortija a caballo y ensartar una sortija pendiente de una cinta que, mire Vd. por dónde, me entero de que hasta las pintaba don Francisco Bonnin. Siempre nos enseña algo nuevo el afamado periodista al que creía villero, pero no, es ranillero. Pero eso de "correr sortija" o "carrera de cintas", que es como la conocía yo, no sé de dónde es originaria en nuestra isla, ya que lo que yo recuerdo son las carreras de cintas en La Laguna, antes de la guerra, en la calle de La Carrera, que ahora me pregunto si este nombre de la calle (ahora Obispo Rey Redondo y peatonal, a Dios gracias) es el de aquel festejo de las Fiestas del Cristo. Era una delicia ver los caballos corriendo y el jinete o jineta con una varita en la mano intentando atrapar la sortija pendiente de una cinta; creo, que a verdad ni sé ahora si era así o si ha influido en mi mente lo que dice el diccionario. Lo que no me explico en este siglo de "progresía" que vivimos es cómo no se ha resucitado de nuevo esta hermosa tradición lagunera y festiva, que ahora se podría celebrar en la plaza del Cristo en sus fiestas, digo yo, ya que el resto de la ciudad, (la primera de la Isla y no se del Archipiélago) es monumental y no están las cosas para que la invadan escuadrones a caballo. Para los niños de ciudad, eso de las carreras de cintas era todo un espectáculo y les aseguro que lo seguiría siendo si se reanudase tan hermosa tradición, que me permito sugerir al actual, joven y dinámico alcalde lagunero, que no todo van a ser romerías de San Benito, bienvenidas en todo caso, y que en mi ya muy lejana juventud no existían y si lo eran es que pasaban desapercibidas, y eso que recuerdo haber veraneado un año en el camino de San Diego.
José Mª Segovia Cabrera