Mira Pepe Ignacio: no te sorprendas si te dicen que ando por las calles con chilaba mora, moviendo la cabeza atrás y adelante, mientras recito los suras del Corán y el abecedario del Tamazigh. No, no estoy loco; es que me estoy poniendo al día, como nos avisan desde este diario de nuestros amores, cada vez con más urgencia. Y a lo mejor tienen razón, Pepe Ignacio, porque un repaso a las noticias de la semana nos indica que por ahí llega el futuro.

Mira, Paulino Rivero se fue a Marruecos a negociar con nuestros vecinos cómo pueden instalar sus capitales en Canarias. Al tiempo, recomienda a los capitales autóctonos que inviertan en otros lares, como la costa frontal marroquí, Cabo Verde, Senegal, Turquía y en países latinoamericanos más o menos estables, a los que podemos enseñar nuestro "saber hacer turismo". Porque el "monocultivo autóctono" ya no da más de sí. Con la crisis hemos perdido más de medio millón de turistas alemanes e ingleses, que esos sí que saben apretarse el cinturón y practicar la máxima ignaciana de "en tiempos de tribulación, no hacer mudanza". Y con el turismo peninsular estamos expectantes por el aumento de los precios del petróleo y tantos obreros parados por allá.

En cambio, acá, mientras se desploma la inversión extranjera en las Islas en un 86%, los empresarios canarios -"estimulados"- aumentan en un 777% sus inversiones en el exterior, principalmente en los países que más competencia pueden hacer a nuestro turismo. Y es que hay que hacer hueco a la invasión cherifiana. La que pondrá en marcha el atractivo de bajos precios turísticos en la costa marroquí y nos utiliza, gracias a Cubillo y a sus seguidores , para convertirnos en una de las taifas del Sultán y también para que le ayudemos a comercializar el petróleo, los gases y fosfatos que España fue cediéndole gentilmente.

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Y es que se está produciendo una entrega de Canarias a los moros, con un "referéndum de los pies", como en Argelia. Se van los godos y canarios preparados, mientras se deja que las islas vayan ocupándolas plutócratas bereberes y obreros colaboracionistas saharauis, a quienes no les importa trabajar para los fines del sultán en la silenciosa reconquista de Al Andalus. Los que llegan en cayucos se instalan en los barrancos, junto a los cultivos abandonados del pasado siglo. Pero los otros, llegan en vuelos chárter con maletines llenos de euros para comprar todo lo que se vende a buen precio a causa de la crisis. Y mientras, nuestros ecologistas -la mayoría no nacidos en Tenerife- impiden que se hagan nuevas obras públicas que crearían empleo autóctono y nos prepararía para competir con las infraestructuras marroquíes, levantadas con bajos salarios. Boicotean el puerto de Granadilla porque hay que salvar los sebadales, mientras el nuevo puerto de Agadir, el superpuerto de Tánger-Med y la futura zona franca de Castillejos amenazan con quitarnos el descendente tráfico marítimo de nuestros puertos isleños y del de Algeciras.

Nuestros profesionales, médicos, enfermeras, abogados, maestros,?como el sueldo extra no les da para vivir, tienen que emigrar. En principio a la Península. Pero como allí hay tanto paro como acá, se van después a otros países de Europa, Latinoamérica, Canadá, Australia, Nueva Zelanda o a alguno de los cuatro "tigres asiáticos", a los que todavía no llegó la última crisis. Aquí contratamos entre tanto a foráneos.

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Y es que, Pepe Ignacio, hay que invertir fuera para despejar el camino a la República Socialista Afrocanaria que nos van a construir ZPARO, Cubillo y Felipón, el representante del supermillonario mexicano Slim, gran lobbista también del sultán de Marruecos. ¿Quizá vino esta semana, en nombre de ambos, a recomendarnos, como nos dirá ZP cuando nos visite a final de mes, en esa esperada cumbre, que hay que cambiar nuestro modelo productivo? Pero no ha dicho en qué actividades van a sustituir a los cientos de miles de empresas, autónomos y puestos de trabajo productivo que se han destruido en las islas. ¿Y qué actividades son las que nos convertirán en la punta de lanza de las empresas "ecologistas y sostenibles", sin dinero público que las sostengan, ni cómo vamos a suministrarles energías baratas, si dependeremos de la cara electricidad y Marruecos en unos años tendrá también energía nuclear para surtir a toda África, pero que no llegará a Canarias? Como bien sabe Cubillo, a quien deberían nombrar jefe del Centro de Inteligencia de lo que queda de Expaña, podría aprovechar la información que allí reciba para montar su república canaria asociada al sultanato marroquí.

Y es que debe ser un adelantado del gran lobbista Felipe González. El mismo que en la Cámara de Comercio de Las Palmas anatematizó a los que quieren seguir dependiendo del cemento, del ladrillo o del turismo y el sol, mientras apoyaba la idea de Zparo para que se mantenga en el seguidísimo de la "obamitis": invertir el dinero de todos los españoles y canarios para salvar a las instituciones financieras. Pero sin nacionalizarlas, sino controlándolas, no a través del Banco de España, sino a través de los liberados sindicales o los millonarios del partido en el poder, para que sigan también controlando los medios de comunicación, con el fin de que el sedicente partido de los obreros siga dándoles subsidio para malvivir, mientras los "aparatchisk" utilizan a inmigrantes africanos y todos los medios de producción y financieros, de la un día llamada España, para ensanchar la nómina de millonarios de izquierdas, saltándose la Constitución y profundizando las 17 taifas desiguales en derechos, deberes y mercados, al tiempo que benefician a sus feudos electorales de Cataluña y Andalucía, con financiación superior a la media nacional, como prometió Zapatero. ¡Viva la Justicia, la igualdad y la solidaridad de zparo!

Crecen los parados. ¡Qué más da! Se votan créditos extraordinarios con cargo a deuda pública, que nadie nos compra, hipotecando así el futuro de nuestros tataranietos. Nada de crear empleo. Se habilitan créditos extraordinarios y subidas de impuestos fáciles, para prolongar el subsidio de desempleo; las ayudas a la reinserción laboral con cursos de catavinos, por ejemplo, o se da más dinero para que los municipios y empresarios amigos tengan colocados a los "nuestros", mientras llega la anunciada reactivación zapateril.

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Así, será difícil lograr con las recetas del lobbista González mejorar la productividad y competitividad; mantener las prestaciones sociales; evitar nuestra dependencia energética; pagar el cambio climático y librarnos de la presión migratoria y terrorista, mientras Europa en cambio trata de salvar su papel en el mundo. No hay que olvidar que el mencionado lobbista afroamericano es el presidente del Comité de Sabios que diseñará el futuro de la Unión Europea, quienes no pueden decir nada sobre el papel de las instituciones comunitarias y sin que todavía hayan aportado ninguna propuesta para la salida de la crisis. No te preocupes, porque la fórmula salvadora saldrá de las conclusiones del semestre "planetario" de la Presidencia española de la UE, que nos aportará a todos la recuperación en el 2010. ¿Cómo estaremos para entonces, Pepe Ignacio?