PENSABA escribir esta semana sobre la Semana Santa en Santa Cruz de Tenerife que comienza el próximo domingo con los actos del Domingo de Ramos, en que recordamos la entrada triunfal de Jesucristo en Jerusalén, pero es tan agobiante el problema del paro en las Islas, que voy a referirme brevemente a él. Además me afecta directamente, en algunos de mis familiares directos, y son muchas las "anomalías" dignas de hacerlas constar. Es el caso de un economista, tinerfeño, que ha estudiado en La Laguna su carrera, sin trabajo actualmente, y se realiza un curso con una duración de cinco meses de Agente de Desarrollo Local, que junto con sus conocimientos anteriores acreditados, le capacita para realizar una buena labor en el desarrollo local. Se convocan unas plazas para estos especialistas y mira por donde le dan prioridad "absoluta" a los que tengan experiencia, lo cual parece lógico, pero quieren decirme ustedes ¿cómo estos titulados que acaban de terminar su curso, intentando reciclarse y conseguir un trabajo, van a conseguir esa experiencia que se les pide, si se les dan las plazas a los que ya han trabajado? Estos cursos deberían contar con una serie de plazas al terminar, al menos a los que hayan realizado el curso con aprovechamiento, tema que debiera ser objeto de consideración o control, para que puedan lograr esta experiencia que luego el INEM les va a exigir.

Añadir a esto que los residentes y nacidos canarios que el presidente Rivero dice lógicamente querer proteger, y promocionar preferentemente, tienen que pagar los derechos para hacer el curso, mientras los emigrantes no tienen que abonar nada y pueden hacer libremente cuantos cursos quieran. Resulta muy "humanitario", pero es una injusticia para los que han estado cotizando ellos mismos o sus familias durante toda una vida. Comentar también que si bien los extranjeros e inmigrantes tienen derecho a la Seguridad Social, y muchos vienen aquí a operarse, muchos canarios no tienen ese derecho o tienen que solicitarlo con ciertos requisitos. ¡Una anomalía más!

Antes de meterme con el paro en las Islas que según la prensa llega a la escalofriante cifra del 30%, casi uno de cada tres trabajadores potenciales está sin trabajo, decir que hoy se cumple el 70 aniversario del final de la guerra "incivil", guerra que resultó inevitable según muchos respetados historiadores, ya que según un eminente y reconocido republicano como Gregorio Marañón dijo: la II República española, resultó un "fracaso trágico". Y que según el historiador Pío Moa, procedente de la extrema izquierda de la cual se desilusionó, ese día terminó la guerra no solo entre la izquierda y la derecha, o los nacionales y los republicanos, sino también entre los comunistas y los que no lo eran dentro del bando republicano.

Según la articulista de ABC Yolanda Gómez, el servicio de estudios del BBVA habla de 4,5 millones de parados en 2010 y sin ver el final del túnel. Hoy los medios de comunicación hablan de que el paro en España es del 15,5%, prácticamente el doble de la Unión Europea que está en el 8%, de cada dos parados europeos uno es español. Holanda por ejemplo está en el 3% de paro. Alemania, que yo sepa está, aunque poco, creando empleo. En Canadá no hay paro. Es decir, la crisis es mundial pero algunos países, bien porque han ahorrado como Canadá, y no han vivido por encima de sus posibilidades como España y otros, la situación es mucho mejor, menos angustiosa. ¡El trabajo es lo más importante! Continúa diciendo Yolanda Gómez que cómo se iba a solucionar el problema de la crisis si ni siquiera se reconocía, se echaba la culpa a otros y se han tomado medidas de cara a la galería, para tratar de contentar a todos y tener un mínimo coste social y electoral. Se hace necesario realizar reformas que permitan crear empleo (hay países que lo logran), y los empresarios y los sindicatos (que prácticamente han desaparecido) deberían tomarse el problema en serio y no tratar unos de abaratar el despido, y otros de subir el sueldo a los que trabajan, olvidándose de los que no trabajan.

El vicepresidente del Gobierno y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, ha admitido que el paro en Canarias ha de ser motivo de especial preocupación, no estando hablando sólo de un problema económico sino social, ya que su impacto es muy elevado. Debiendo debatirse en breve un programa de medidas específicas para hacer frente a esta crisis en el Archipiélago. ¡Ojalá se haga y sea efectivo, lo necesitamos! Canarias es también la región española que más empleos destruye en el comercio minorista, con una bajada del 4,5% en el número de empleados. El presidente de la Comisión Europea, Durao Barroso, pidió en Bruselas a los jefes de Estado que se busquen soluciones "efectivas" al aumento del paro y lo que debería ser muy importante: que todas aquellas personas que se queden en paro "deben recibir los subsidios adecuados", siguiendo en contacto con el mercado laboral mediante cursos de reciclaje y formación. Conozco matrimonios con los dos sin trabajo, con hipotecas y gastos imprescindibles y que no perciben un solo euro, porque se ponen todas las pegas y requisitos para evitarlo. ¡Esto no puede continuar! ¿Estamos o no en el primer mundo? Hasta Felipe González, en cuyo gobierno llegó el paro al 20%, pide un pacto de Estado para afrontar la crisis, constituyendo la prioridad número uno el empleo, siendo las medidas tomadas hasta ahora insuficientes, haciéndose necesario poner a todos de acuerdo, no "mano militari u ordeno y mando".